Miguel y Montserrat Bogaert, una historia de fe y amor

Miguel y Montserrat Bogaert, una historia de fe y amor

Miguel y Montserrat Bogaert/Foto: Iluminada Paulino.

Miguel y Montserrat Bogaert son los pastores de la Iglesia Monte de Dios, desde la cual dirigen el Ministerio Matrimonio con Propósito, el cual tiene como objetivo restaurar, fortalecer y transformar los matrimonios a través de la enseñanza y el conocimiento de Dios.

Cada uno tiene una interesante historia que contar, la cual los llevó al lugar en el que se encuentran hoy y a realizar esta labor tan comprometida que desde hace más de 20 años, están llevando a cabo.

¿Cómo inician sus historias en la fe y su entrega
incondicional a Dios?
Pastor:

Mi historia de fe empieza con la necesidad que tiene todo ser humano de llenar ese vacío inexplicable que nos asalta en algún momento. La respuesta de Dios hacia mí fue impactante, así que empecé a buscar de Dios y él se manifestó por medio de mi rol como médico. Ahí reconocí mi debilidad como ser humano y como profesional y Él empezó a actuar en mi vida”.
Pastora:

Yo desde niña había estado involucrada en todo lo que tiene que ver con el acercamiento a Dios. Lo viví con mi madre, que era mujer de oración. Vine a la ciudad por un asunto de trabajo y visité la iglesia donde nos conocimos Miguel y yo”.

Los primeros siete años de su vida matrimonial, fueron los que marcaron el rumbo que tomaría su relación y lo que Dios quería hacer con ellos.

Después de la crisis, todo empezó a tomar forma e hicieron el compromiso de entregar sus vidas a esta causa y dedicarse a fortalecer y hacer comprender a las parejas los principios, valores y el sentido real que tiene el matrimonio.

Empezaron a recibir parejas en la sala de su casa cada miércoles, y fue tal la cantidad de personas que asistían buscando soluciones a sus problemas de pareja, que pronto tuvieron que rentar otro espacio para sus reuniones, pues en menos de tres meses, ya eran más de 200 personas, y es ahí donde nace la Iglesia.

El ministerio “Matrimonio con Propósito” está fundamentado en la familia y en los matrimonios, y por medio a éste, se realizan todos los años un gran evento de bodas colectivas. Allí se organizan todos los procesos para que las parejas que no tengan toda la documentación, puedan por medio a sus abogados, conseguir los papeles que les exige la ley para casarse.

También desarrollan el retiro “Plenitud”, donde asistir alrededor de 500 parejas y cuentan también con una Escuela de Matrimonios en la iglesia, donde son reforzados aspectos como la identidad de hijos y la identidad de padres, y donde son rescatados además, esos valores que unen a las familias
¿Cómo funciona el ministerio? ¿Cómo las parejas
se integran?

Pastora:

Muchas de ellas son parte de la congregación. Otras vienen de otras iglesias y otras escuchan testimonio de familiares y amigos y cómo los problemas se van solucionando cada vez más. Ellos entonces, con ese testimonio, impulsan a otros a buscar de Dios.

¿Existen restricciones para formar parte
del ministerio?
Pastora:
No. Estamos abiertos y cualquiera pareja puede venir. Solo deben tener una carta de su Pastor que nos autorice a ministrarlos.

¿Cuales enseñanzas promueven en el ministerio como
ejemplo a seguir?
Pastora:
Valores como el respeto, honestidad, confianza, transparencia. Hay que ser genuinos, auténticos y transparentes.

¿Cuáles son las bases que debe tener el matrimonio para su estabilidad?
Pastora:

Yo creo que el respeto, porque sin esto, es imposible que se puedan solidificar. Además, un matrimonio tiene que saber cuál es el propósito por el que Dios los unió, porque cuando el interés se vaya y lleguen los problemas, el matrimonio se acaba. Por lo tanto,+ hay que saber cuál es el propósito de su matrimonio, por qué están unidos y qué Dios quiere hacer con ellos.

¿Como pareja, cuales son los valores que priman en su matrimonio?
Pastor:

Yo soy de la gente que entiende que el amor no es lo que sustenta un matrimonio, sino más bien el conocimiento y el entendimiento de saber adaptarse el uno con el otro. El 98 % por ciento de los matrimonios que se divorcian, lo hacen amándose y queriéndose, pero se divorcian porque no se supieron adaptar el uno con el otro. Matrimonio significa aprender a morir. Yo creo que la base de nuestro matrimonio ha sido la manera en que hemos aprendido a adaptarnos.

El matrimonio son dos personas que vienen con dos historias, a las que hay que dedicarle tiempo para adaptarlas y hacer una historia en común. Entonces, la gente cuando se casa piensa que casarse es una responsabilidad de vivir juntos, trabajar y procrear hijos y se acabó, pero matrimonio es aprender a adaptarse el uno al otro, es un proceso de adaptación.

¿De qué carecen los matrimonios hoy en día?
Pastor:

Pues precisamente de valores. Se han degradado los valores. Primero, los valores individuales. El hombre está viviendo un mundo de ilusión y fantasía en el que ellos mismos no se conocen. También la falta de propósitos, porque cuando no conoces tu propósito, vas a querer lo que el otro tiene. Hay una falta de identidad de quién yo soy, y si no sé quién soy, no puedo saber cuál es mi propósito. La gente se casa pero no sabe cuál es el propósito de casarse. Lo que nos hace indivisibles es el propósito que tenemos, hacia dónde vamos y qué queremos, porque cuando vienen los problemas, lo que nos sostiene es eso: el propósito que tenemos.

Para lograr la estabilidad y la unión familiar, ¿cuál es clave?
Pastora:
Dios. Cristo es la roca que tienen los matrimonios para sostenerse.
Pastor:
El matrimonio no fue hecho por el hombre. El matrimonio es una idea de Dios.

¿Cuál es la mejor enseñanza que le pueden dejar a sus hijos?
Pastor:
El temor reverente a Dios. Si hay algo en lo que me esfuerzo todo el tiempo, es para que ellos tengan esa relación con Dios.

Como líderes de iglesia y como ejemplo de sociedad, ¿qué consejo ofrecen para lograr una vida matrimonial y familiar feliz o estable?
Pastor:
Yo creo que la felicidad no es total. Lo que nos da la felicidad, es aplicar los valores que Dios nos da y ver cómo la otra persona se siente con esos valores. La sociedad, cada vez más, está siendo atacada en todos los niveles y en todas sus estructuras con todo lo que Dios ha creado.

Es un ataque muy fuerte el que estamos recibiendo como sociedad. Yo creo que nosotros lo que tenemos que entender es que, si queremos un matrimonio estable, éste debe estar fundamentado en los valores que mencionábamos y en el respeto y en la identidad de quienes somos.

La felicidad nunca es total, pero el gozo sí puede ser total. Todo lo que pones en las manos de Dios, tarde o temprano será de gozo y bendición. A la sociedad le falta conocer a Dios. Si todos los abogados conocieran lo que es el matrimonio en Dios no divorciaran una sola pareja.

Sobre Miguel…

EL Dr. Miguel A. Bogaert es un hombre con un fuerte llamado de Dios en ministración del alma y consejería matrimonial. Es Cirujano torácico, Neumólogo, y Coronel de la Fuerza Aérea de República Dominicana,
ocupaciones de las que hoy ha
desistido para dedicar su vida al
propósito de Dios.

Sobre Montserrat…
Es una activa mujer de oración e intercesión y se destaca por el poderoso don del discernimiento. Además, es autora de los libros

“Devocional Diario Palabras de Vida” y “En la Brecha”.
Ingeniera en sistemas, profesión que dejó de ejercer al momento de dedicarse al servicio de Dios.

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