Son la cara del presente y del futuro inmediato de las Grandes Ligas, dos de los mejores jugadores ofensivos del negocio… por mucho.
Ellos son el jardinero central de los Angelinos de Los Angeles, Mike Trout y el jardinero derecho de los Nacionales de Washington Bryce Harper.
Ambos tienen excelsas condiciones físicas, dominan el juego en ambos lados y le imprimen una chispa muy particular a su estilo de juego, lo que tiene más que emocionado al comisionado Rob Manfred.
Pero también se expresan bien y fijan posiciones con relación al bienestar del deporte aunque uno más que otro, como es el caso de Harper en el pasado reciente.
Analizar y poner sobre una balanza cuál de los dos es el mejor jugador no es un tema nada fácil cuando se trata de comparar a Trout y a Harper.
En el caso de Trout, es el jardinero central de los Angelinos, un hombre que con apenas 24 años de edad ya tiene un premio al Jugador Más Valioso en su bolsillo y tres segundos lugares en ese mismo galardón.
Es un pelotero que combina el bateo del promedio, con el poder, corre bien las bases y también anota muchas carreras, además de jugar una impecable defensa en la posición premium del negocio.
En tres de sus cuatro temporadas completas en las mayores ha pasado de los 30 cuadrangulares.
En tres de esas cuatro temporadas completas ha pasado de las novena remolcadas y en las cuatro temporadas completas que ha jugado en Grandes Ligas ha pasado de las 100 anotadas, liderando la Liga Americana en tres oportunidades en ese encasillado.
Tiene cuatro Bates de Plata y ha ido cuatro veces al Juego de Estrellas.
Por cada 162 partidos que ha jugado en su carrera con los Angelinos, tiene promedio de .304, con 35 vuelacercas y 100 remolcadas, además de 117 anotadas.
En sentido general acumula 146 jonrones y 420 remolcadas, además de que es un buen robador de bases, que lideró la liga en una oportunidad con 49 estafas.
Harper, por el otro lado, también tiene mucho poder, con un título de jonrones en su bolsillo (42 el año pasado) y un promedio de 32 jonrones por cada 162 partidos con los Nacionales.
No produce tanto como Trout (promedia 83 impulsadas por 162 partidos), pero todo el mundo sabe que esa estadística no es del todo objetiva.
Anota menos, con 104 carreras por cada 162 juegos, y no cuenta con la misma velocidad que Trout en las bases.
Harper tiene una proyección de poder mayor que la de Trout, pero todavía no ha llegado al mismo nivel, aun cuando ambos tienen cuatro temporadas completas en las mayores.
Harper ya cuenta con un premio al Jugador Más Valioso de la Liga Nacional, un Bate de Plata y tres visitas al Juego de Estrellas.
Trout cuenta con 24 años, mientras que Harper tiene 23.
Ambos son impresionante en más de un sentido de la palabra.
Pero tomando en consideración el valor posicional de Trout y que sus números aunque similares siguen siendo superiores a los de Harper, por obligación tenemos que inclinarnos a elegir al jardinero del equipo californiano como el mejor de los dos cuando se habla de talento joven.