Las principales playas del país presentan un grado de deterioro tal que si no son intervenidas, la oferta turística se afectará significativamente. Ante esto es necesario su intervención para preservar y/o mejorar sus condiciones naturales que le imprimen el atractivo turístico, lo que permitiría mantener el nivel de competitividad en la oferta de sol y playa.
Así lo establece el Ministerio de Turismo (Mitur) entidad que convocó una licitación para la regeneración de 13 playas de cinco provincias. Los balnearios a ser intervenidos Juan de Bolaños– Costa Verde y El Morro en Monte Cristi; Cofresí en Puerto Plata; Playa Bonita, Punta Popy, Ballena y Cosón en Samaná; Cabeza de Toro, Macao, Arena Gorda – Cortecito y Bayahíbe en La Altagracia; Juan Dolio en San Pedro de Macorís, y Boca Chica y Andrés, en Santo Domingo.
En común estos balnearios presentan problemas de erosión, contaminación por descargas de aguas residuales y desechos sólidos, construcciones ilegales en la franja de los 60 metros destinada al público, afectación de las dunas por uso intensivo.
También se citan la privatización e impedimento de entrada a las playas y zonas costeras, instalación de marinas y áreas de navegación en lugares inapropiados, destrucción de la vegetación costera, construcción de elementos que interfieren en el transporte litoral y las dinámicas marinas, entre otros daños.
El diagnóstico de cada playa fue realizado por el Consorcio Euroconsult Atteco, el cual fue contratado de urgencia en marzo pasado para el levantamiento.
“Que de no tomarse las medidas necesarias para la recuperación integral de los sistemas de playas, no podríamos garantizar la sostenibilidad ambiental y la seguridad de la inversión extranjera en nuestro turismo de sol y playa, provocando esta situación el colapso de la industria turística nacional”, manifestó Mitur en los documentos que sustentan el proyecto.

Para la regeneración de playas, el Gobierno dispondrá de un financiamiento de US$100,000,000 y existe una convocatoria a licitación pública internacional que cierra el miércoles 16 de este mes.

Monte Cristi. Entre los trabajos que se realizarán en las playas de esta provincia, está la retirada de los bloques de hormigón para detener la erosión, pero que afectan la dinámica del litoral. Se construirá un dique sumergido para proteger la costa del oleaje.
También se aportará de arena en las zonas erosionadas; se construirán un acceso peatonal y obras de servicios como papelera, ducha y lavapiés. Además habrá un nuevo trazado en de la carretera que irrumpe la playa de Costa Verde.
Puerto Plata. La erosión y contaminación por vertidos de aguas residuales procedentes de duchas y otras fuentes de agua de varios establecimientos turísticos, han afectado la playa Cofresí donde también hay ocupación de la zona de 60 metros por estructuras turísticas que no permiten el uso público de la playa, indica el diagnóstico.
Como soluciones se plantean regenerar 900 metros de playa; construcción de arrecife artificial; eliminación de barreras al transporte litoral, así como un emisario submarino de aguas residuales.

Se prevé la instalación de duchas, zafacones, rampas de acceso y una torre de vigilancia para socorristas.
Samaná. Los problemas son similares, por lo que se demolerán los muros de contención y se vertirá arena para evitar que el oleaje incida en esta zona; se habilitarán siete pasarelas de acceso público peatonal hasta la playa; se construirá un aparcamiento; se habilitarán accesos peatonales y servicios de baños y zafacones. Además, se instalarán torres de vigilancia

La Altagracia. El uso intensivo de las playas de esta provincia, donde se encuentran cerca del 70% de los hoteles de todo el país, ha provocado afectación del terreno debido a la alta circulación vial, peatonal, paseos a caballo, embarcaciones, pequeños comercios.
Adicionalmente estas playas presentan erosión, contaminación y ocupación de área pública, por lo que serán demolidas las estructuras ilegales y que afectan la dinámica costera.
En el caso de Bayahíbe, su gran problema es la existencia de un gran número de barcos de diferentes tamaños que se encuentran a lo largo de la línea de costa, siendo un balneario con alta presión. Además vertidos de basura; muros, zonas rocosas fracturadas por donde el agua empieza a socavar la arena de la playa.
El proyecto plantea un reordenamiento de las obras de playa.