LA PAZ, AFP. El presidente boliviano, Evo Morales, señaló este miércoles, al comenzar su último año de mandato, que serán prioridades de su gobierno avanzar los planes para producir energía atómica en el país e integrar a Bolivia por vía férrea con Brasil y Perú.
El mandatario hizo un informe de gestión ante el Parlamento que duró más de cuatro horas y definió las líneas de las tareas gubernamentales para el futuro.
«Este año vamos a empezar el programa boliviano de energía atómica con fines pacíficos», afirmó el gobernante en su discurso ante una sesión pública del Parlamento.
Morales, que postulará en octubre para un tercer mandato para el período 2015-2020, acotó que «hemos decidido crear una comisión de energía de alto nivel, con los mejores científicos físicos y matemáticos de Bolivia, porque se trata de una prioridad estratégica del estado boliviano».
El mandatario -que durante su gestión, nacionalizó la riqueza hidrocarburífera y aplicó una política estatista- también señaló que su gobierno trabajará en el diseño de una vía férrea interocéanica por su territorio, para unir comercialmente a Brasil y Perú.
«Hablé bastante con el compañero presidente (de Perú, Ollanta) Humala, con (el expresidente de Brasil, Luiz Inácio) Lula da Silva y con (su sucesora) Dilma Rousseff.
Está en proyecto, y nosotros somos los primeros responsables de impulsar este ferrocarril biocéanico. Este año se verá cómo empezar el proyecto», dijo.
Bolivia pretende construir unos 1.500 km de vía férrea en su territorio para unir Brasil con Perú con la idea de que el comercio brasileño se desplace a países del Asia por los puertos del sur peruano, aunque admitió que el plan sería concluido a muy largo plazo.
El gobernante también indicó que este año impulsará la consolidación de proyectos hidroeléctricos y termoeléctricos para que su país comience a negociar con sus vecinos la compra-venta de energía.
Sobre las próximas elecciones generales y legislativas en octubre, en las que Morales buscará una nueva reelección hasta 2020, el mandatario se limitó a señalar que las nuevas autoridades «deben entender que hacer política no es para hacer negocios u obtener beneficios, sino para servir» al país.