Navidad tranquila 2014

Navidad tranquila 2014

Que la navidad resulte tranquila no será responsabilidad exclusiva de los 28 mil policías y militares enviados a las calles a patrullar noche y día para prevenir delitos, percances viales y desajustes de la cordura. Parte de la tarea corresponderá a cada uno de los ciudadanos, que deberán asumir en todo momento una conducta apegada a las buenas prácticas sociales. La diversión, en cualquier circunstancia o contexto, no debería conducir a conflictos y pesares.

Un requisito fundamental para que la prevención funcione es que los mandos policial y militar mantengan un monitoreo estricto de la conducta de los hombres enviados a patrullar. Algunos incidentes con civiles tienen su origen en excesos cometidos por autoridades. Los hombres enviados a las calles para prevenir desajustes deben estar adiestrados para lidiar con gente en circunstancias de disfrute en las que es común que medien las bebidas alcohólicas.

El hecho de que en esta oportunidad las autoridades hayan incluido a organizaciones de la sociedad en los equipos de prevención puede ayudar mucho al éxito del operativo. A los ciudadanos les corresponde no exponerse innecesariamente al riesgo de atraco o robo al manejar el dinero de la regalía pascual, realizar compras o salir a divertirse. Hay que recordar que para estos tiempos los delincuentes también ejercen su función antisocial las 24 horas del día.

ABUSOS CONTRA EL CONSUMIDOR

La especulación desmedida parece consustancial al ejercicio comercial y siempre, claro está, en perjuicio de los clientes. Lo confirma la advertencia hecha por el Instituto de Protección del Consumidor (Pro Consumidor) acerca de la práctica de algunos comercios, de añadir porcentajes adicionales a las cuentas de los clientes que compran con tarjetas de crédito por concepto de pago de servicio. El organismo advierte sobre la ilegalidad de esta práctica y su disposición de actuar en consecuencia contra los comerciantes que abusen de esa manera en perjuicio de tarjetahabientes.

Para ayudar a frenar esta deslealtad de algunos comerciantes inescrupulosos, todo ciudadano que resulte afectado por esta práctica, debe denunciarlo a Pro Consumidor o ante cualquier otra autoridad que este organismo señale. Hay que declarar tolerancia cero a toda práctica que lesione el presupuesto familiar.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas