De aplicarse el voto preferencial a nivel municipal en 2020, aumentaría el número de boletas electorales de 164 a 450, con las que se elegirían 1,164 regidores y sus suplentes y 730 vocales, incrementándose el costo de la campaña, según una investigación llevada a cabo por las unidades de Partidos Políticos y Gobierno Local del Observatorio Político Dominicano (OPD-Funglode).
A este escenario se sumaría que se celebrarán elecciones municipales y congresuales, en febrero, y en mayo del mismo año se realizarán las presidenciales. Esto implicaría un montaje más complejo de lo que se ha visto hasta el momento en el país, debido a que al separar las votaciones de alcaldes y regidores se corre el riesgo de una fragmentación del voto, afectando la gobernabilidad municipal, dice el estudio.

Otras de las desventajas que presenta esta modalidad, según el informe del OPD-Funglode, son aumento del transfuguismo, reducción del nivel de representación de los partidos minoritarios y arrastre en favor de los senadores.

El análisis establece como la mayor ventaja de la modalidad de elecciones por listas cerradas y desbloqueadas, que los electores escogen directamente al aspirante de su preferencia de una lista presentada por los partidos y que los votantes pueden manifestar directamente su preferencia por un determinado candidato.

En República Dominicana el voto preferencial había sido eliminado por la Junta Central Electoral (JCE) a través de su resolución número 74-2010, luego de ser aplicado en las elecciones del 2002, 2006 y 2010; sin embargo fue restablecido para las elecciones de 2016 tras aprobarse en 2013 la Ley 157-13.

Cuota femenina. El informe también indica que el voto preferencial a nivel municipal no garantiza el cumplimiento de la cuota femenina establecida en la ley 33-18, sobre Partidos, Agrupaciones y Movimientos Políticos, ya que tradicionalmente los hombres han dominado el ámbito político nacional.
Esto se agravaría por el hecho de la competencia económica de las candidatas con relación a los candidatos.
Desventajas. Dentro de las desventajas, el estudio cita el hecho de que genera incremento de las luchas internas y de los costos de la campaña.
Agrega que esta forma de voto incrementa las confrontaciones entre los candidatos del mismo partido en la campaña, pudiendo debilitar la organización partidaria.
Así, los candidatos incurren en el clientelismo con el objetivo de conseguir el caudal de votos necesarios para lograr su elección.
El Observatorio Político Dominicano (OPD) es una iniciativa de la Fundación Global Democracia y Desarrollo (Funglode).