Cuando el ejemplar pura sangre de carrera de nombre “ORMONDE”, un hijo de Ben Or, en Lily Agnes, se convirtió en el primer caballo en lograr un Triple Corona de la hípica Británica en forma invicta, su nombre pasó a revistar entre las glorias mayores del turf Inglés.
El Conde de Westminster, feliz propietario del crack, juntos a los más íntimos colaboradores de su stud, dieron más valor a la hazaña, pues sabían de las dificultades en las vías respiratorias que afectaban al animal.
Ormonde, como padrote, resultó ser un fracaso, ya que de los siete vientres que fecundó en su primera producción, solo uno quedó grávido. Luego de prolongadas reuniones con el director técnico de las haras y los veterinarios del establecimiento, el Duque decidió desprenderse del invicto que, además de “Roncador” había demostrado ser poco fértil.
El administrador del establecimiento hizo ofrecimiento a varios caballeros europeos y americanos, solamente el señor Salvador I. Bocau, se interesó y ofreció 120.000 libras de esterlinas, oferta que fue aceptadas.