El pastor Ezequiel Molina Rosario consideró ayer que es en los hogares donde está la génesis de los niveles de delincuencia vividos en estos tiempos.
El líder cristiano, al pronunciar el mensaje central de la 53 versión de la congregación evangélica La Batalla de la Fe, atribuyó a la irresponsabilidad de los padres la descomposición de la sociedad.
Dijo que la preocupación de los hogares en la actualidad es salir a producir dinero, mientras que la televisión y el Internet son los que educan a sus hijos y que la delincuencia pasa esa factura.
Entiende que la mujer de hoy día ha dejado de lado el rol de criar a sus hijos, ya que no son capaces de sacrificar unos años la vida profesional para bien encaminar a su procreación.
El reverendo volvió a fijar su postura en contra del aborto, aunque en esta ocasión dijo creer que el médico honesto, en ciertas circunstancias de emergencia debe tener la libertad de decir lo conveniente, pero en el caso del incesto y violación dijo, no puede ser una excusa para abortar. A su juicio, no puede ser la criatura quien pague por el error de otro.
Dice que el aborto jamás borrará el trauma de una violación, todo lo contrario, suma otra fustración.
La reconciliación. Fue el tema central del mensaje de la multitudinaria actividad y en ese marco, planteó la necesidad de que el Estado se reconcilie con Dios y con los valores de los padres de la patria, de quien dice, eran hombres de fe.
“Tenemos que reconciliarnos con la verdad, la justicia y la administración equitativa” expresó el pastor evangélico.
También cree que la Iglesia debe volver a sus inicios y dejar de lado las cosas materiales.
Entiende que hay gente que se hace llamar cristiano y su comportamiento es de enemigo de Cristo.
Volver a Dios. Molina Rosario entiende que la actual crisis que vive la humanidad inició al haber dejado de lado a Dios, y que por lo tanto la solución no debe estar en otro lado.
“La realidad es que nadie ha podido resolver los conflictos de la humanidad, la injusticia de los hombres, y aquí estamos en medio de la nada”, afirmó ante los miles de evangélicos que se congregaron en el Estadio Olímpico Félix Sánchez.
Planteó que el hombre, en su desesperación y en busca de la razón ha llegado a creerse capaz de resolver todos los problemas, crea dioses como la ciencia y la tecnología, que nada han resuelto.
Entiende que la reconciliación debe ser la salida a los conflictos, pero que el orgullo no permite a la gente reconocer las fallas y enmendarlas.