Pediatras piden no dejar se complique salud respiratoria

Pediatras piden  no  dejar   se complique salud respiratoria

El presidente de la Sociedad Dominicana de Pediatría, doctor Edgar Vargas, aconsejó ayer a los padres y tutores de niños y menores de edad a que estén bien atentos a los cambios en el sistema respiratorio que puedan experimentar como consecuencia de la humareda que afectó esta semana al Gran Santo Domingo.
El pediatra aconsejó además que los padres no permitan que los menores se compliquen en el entendido de que posterior al impacto del humo, vendrá el daño a la salud de los niños, los cuales forman parte de la población más vulnerable. Vigilancia es válida.
Vargas recordó que la humareda que afectó a todo Santo Domingo dispersó químicos, los cuales resultan dañinos para la salud en sentido general.
El pediatra insistió en la atención de los padres a los niños con historia de afecciones respiratorias, pues esos son los más afectados con situaciones como la presentada.
Esta semana las autoridades pidieron a las personas que tuvieron algún contacto con el humo que cierren las puertas y ventanas para impedir que el humo ingrese a su casa.
Si es necesario, utilice paños húmedos para sellar ventanas o puertas.
Piden evitar fumar dentro de la casa, tampoco prender velones, velas o incienso para evitar esparcir la contaminación.
Si en su casa o en los alrededores de la misma han caído cenizas del incendio, usar siempre un paño húmedo sobre su nariz o una mascarilla antes de barrer o limpiar, mojando previamente el suelo y las superficies que tienen cenizas.
Asimismo, se recomienda tomar mucha agua para evitar la sequedad de garganta y evitar frotarse o rascarse los ojos. Las autoridades solicitan no hacer ejercicios, ni actividad física en las áreas afectadas por la presencia de humo.
Piden además evitar que embarazadas, niños y niñas, adultos mayores y pacientes asmáticos o con enfermedades pulmonares se expongan al humo de manera directa. Si es necesario, trasladarlos a una zona menos contaminada por el humo.
Llevar al centro de salud más cercano a las personas que presenten: pérdida de la conciencia, mareos, náuseas, vómitos, debilidad, dolor de pecho, dolores de cabeza, latidos cardiacos acelerados, tos persistente, dificultad para respirar, silbidos al respirar, ataques de asma, irritación en los ojos, conjuntivitis o sensación de tener arena en los ojos. Piden estar atentos.

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