La Confederación Cafetalera Dominicana (Concafed) demandó ayer del presidente Danilo Medina más apoyo a la renovación de los cafetales del país, a través del Consejo Dominicano del Café (Codocafé), que es la institución que representa a los productores.
Denunció además que con el proyecto de ley, enviado al Congreso Nacional a través del Senado, se busca desconocer al Codocafé. Pidieron al presidente Medina que reciba una comisión de productores de café para explicarle la situación que los afecta.
Indicó que los caficultores tienen un plan de lucha para ejecutarlo a nivel nacional para evitar que el ministro de Agricultura, Angel Estévez, afecte la economía campesina, la balanza comercial y el medio ambiente, y “la buena imagen del Gobierno del presidente Danilo Medina, a quien solicitamos abrir bien los ojos para no se deje confundir por esa iniquidad”.
En una rueda de prensa, efectuada en la sede Colegio Dominicano de Periodistas, habló como vocero Carlos Ramírez, quien fue acompañado por Juan Bienvenido Guerrero, Antonio Luciano y Faustino Reyes, en representación de federaciones de caficultores de diferentes zonas del país.
El proyecto. Ramírez explicó que el proyecto de ley que crearía el Instituto Dominicano del Café (Indocafé) para sustituir al Codocafé, es “una afrenta inaceptable contra la institucionalidad cafetalera y las decenas de miles de familias que trabajan de sol a sol en las escarpadas montañas del país”.
Dijo que el único objetivo con la creación del Indocafé es para excluir a los caficultores y sus organizaciones de los mecanismos existentes para adoptar las políticas públicas orientadas al desarrollo de la caficultura.
Afirmó que ese proyecto de ley “es una copia literal de la Ley 79-00, del Consejo Dominicano del Café, cuyo único cambio fundamental es que saca de la Junta Directiva del organismo a los caficultores y sus organizaciones, pretendiendo con esto atribuirles la culpa por la profunda debacle en la que ha caído el subsector cafetero dominicano en los últimos cuatro años”.
Baja producción. En el cuatrienio se ha reducido en un 67%, con respecto al 2012 (en un promedio anual de 250 mil quintales) debido a la falta de atención gubernamental por problemas de la Roya del Cafeto, según Ramírez.
Agregó que eso representa pérdidas por unos RD$18,000 millones en cuatro años, empujando de esa manera a la más profunda indigencia a las 30,000 familias caficultoras.
Recordó que el país tenía en el café uno de sus productos tradicionales de exportación y que hoy es un importador neto de ese rubro, de forma tal que el Ministerio de Agricultura, en vez de aplicar a fondo un programa nacional de manejo integrado de la Roya que controlara los efectos nocivos de esa enfermedad, lo que ha hecho es expedir decenas de permisos de importación de café.