Por la tangente .- El mensaje del portavoz presidencial a las instituciones que a estas alturas todavía reclaman recursos adicionales a los asignados en el Presupuesto, a las que advirtió que tendrán que “hacer magia” con los recursos que recibieron porque simple y sencillamente no hay más dinero, ha sido claro y directo, por lo que cabría suponer que todos se habrán dado por enterados. Aparentemente, no ha sido así. Por lo menos en el caso del doctor Roberto Rosario, presidente de la Junta Central Electoral, quien a pesar de que las declaraciones del doctor Roberto Rodríguez Marchena se produjeron a propósito de su anuncio de que solicitará una audiencia con el presidente Danilo Medina para explicarle personalmente las necesidades económicas del organismo electoral, optó por salirse por la tangente y no darse por aludido. “La Junta no va a prestar atención a respuestas emocionales, ni fuera de lo institucional. Para la Junta lo dicho es lo que llega de manera formal o con carta; todo lo demás para nosotros son respuestas emocionales que nosotros no vamos a contestar” ¿Por qué tendría el vocero de la Presidencia que dar una respuesta emocional al reclamo de la JCE? ¿Por qué no pensar que Rodríguez Marchena habló en nombre del Gobierno y el presidente Medina? Está claro que se ha producido un cambio de actitud en el presidente de la JCE, de ordinario arrogante y soberbio, al darse cuenta de que por el camino que va no conseguirá sus objetivos. Y si el doctor Rosario prefiere creer en la palabra del senador Tommy Galán, quien le habría informado del supuesto compromiso del presidente Medina de atender su reclamo, y no en la declaración “emocional” de Rodríguez Marchena de que no habrá más dinero para nadie, ese es su problema y su derecho. Por lo pronto, que conste en el acta que las dificultades económicas por las que está pasando la JCE (adeuda más de RD$1,000 millones a sus suplidores) parecen haberle bajado los humos a su engreído presidente.