Premio Nacional: desafío a la calidad de los servicios públicos

Premio Nacional: desafío a la calidad de los servicios públicos

Estudios indican que el Estado se compone de 4,764 organismos de diversos niveles y ámbitos territoriales. Incluyendo órganos, secciones y departamentos dependientes de ministerios y ayuntamientos. Organismos signados con cientos de auténticas transformaciones estructurales que varios hechos dramáticos de corrupción no han podido ensombrecer. La Nación debiera reconocer que en los pasados 14 años, las 497 entidades públicas participantes en el Premio Nacional de Calidad, arrojan cientos de evidencias de modernización de lo público.
Cada entidad incluida en el Premio, firma una Carta Compromiso de participación, prepara un autoanálisis de gestión institucional y abre sus puertas para ser estudiada por evaluadores capacitados, bajo el prisma de nueve criterios. Los productos finales son escrutados rigurosamente por un Jurado Nacional altamente calificado, diverso y de carácter autónomo, órgano deliberativo que con fundamentos científicos y referencias éticas, eroga la decisión final.
Nuestro Consejo para el Desarrollo Estratégico de Santiago (CDES) participa en este premio desde su fundación hace 14 años. Igualmente se involucra en la Reforma del Estado desde que la Presidencia de la República del doctor Leonel Fernández, instituyó en 1998, la Comisión Presidencial de Reforma y Modernización del Estado (COPRyME).
Los acuerdos pactados en COPRYME fueron asumidos con energía y ética por el Ministerio de Administración Pública (MAP) y su ministro Ramón Ventura Camejo. Su labor es ejemplar en implantar herramientas y sistemas. El respaldo legal lo aportan las leyes 4l-08 de función pública y la orgánica de administración pública 247-12, mandatos de carácter sistémico que imponen una genuina reorganización del Estado.
Hay avances pero aun tenemos grandes desafíos. La Presidencia de Danilo Medina continúa la estrategia de modernización del Estado pactada de forma público-privada a finales de la década de los años 90 del siglo XX. Debemos hacer mucho más, pero lo alcanzado no es poco. La Cuenta Única del Estado (CUT) creada por la Ley 567-05 de Tesorería como herramienta que centraliza recursos. También el aporte del Sistema de Monitoreo de la Administración Pública (SISMAP), las Normas Básicas de Control Interno, el Índice de Uso del Gobierno Electrónico y el control de la gestión presupuestaria, son muy buenas herramientas.

En este contexto se crea el Premio Nacional a la Calidad. Una política pública institucionalizada por dos disposiciones presidenciales. El Decreto 516-05 que fundó este programa y el mandato 211-10 que declara de rigor la aplicación del Marco Común de Evaluación (CAF) de Unión Europea y la firma voluntaria de la Carta Compromiso por los participantes del Premio.

El premio distingue las entidades que asumen la planificación, desarrollo, control y actuación (PDCA). Destaca aquellas organizaciones que se orientan de forma estructurada a servir con calidad; enfatiza dónde los recursos humanos están satisfechos y tienen un clima de trabajo atractivo.

Inclusive, determina hasta qué punto las políticas públicas y los programas que se ejecutan dan resultados. En definitiva, se trata que las entidades del Estado involucradas se distingan por proveer a la sociedad, servicios y productos por los cuales los contribuyentes tributan cientos miles de millones de pesos en impuestos. Definitivamente, el Premio Nacional de Calidad es una de las políticas públicas que mejor evidencian la buena consolidación del Estado dominicano.

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