WASHINGTON. Los médicos podrían contar en breve con dos nuevos fármacos contra la hepatitis C en momentos en que este mal hepático se convierte en un problema importante de salud para millones de personas nacidas durante la explosión demográfica en EEUU.

La Administración de Alimentos y Medicinas (FDA) sostendrá esta semana una reunión pública para revisar dos medicamentos experimentales del laboratorio Johnson & Johnson y de la empresa biotecnológica Gilead Sciences. Si reciben la aprobación, los nuevos productos podrían ofrecer una vía más rápida y efectiva para eliminar el virus.

En un análisis difundido ayer, la FDA indicó que el medicamento simeprevir de J&J tuvo tasas de curación más altas que los tratamientos disponibles en la actualidad, aunque a algunos pacientes también les provocó sarpullido y manchas como las provocadas por el sol.

La FDA preguntará el jueves a una comisión de expertos externos si la etiqueta del medicamento debe advertir sobre el sarpullido y las manchas. La agencia no está obligada a acatar la recomendación del panel, aunque a menudo lo hace. La reunión tendrá lugar en momentos en que autoridades federales de salud han exhortado a las personas que nacieron durante el periodo de la explosión demográfica (1945-1965) en el país a que se hagan pruebas para detectarles el virus, el cual puede pasar inadvertido durante décadas.