La Junta Agroempresarial Dominicana (JAD) propuso un pacto político para asegurar un plan de inversiones en presas con fines de satisfacer las necesidades de agua potable, para la agropecuaria y la industria.
Al participar en el Encuentro Económico de HOY, el vicepresidente ejecutivo de la JAD, Osmar Benítez, dijo que en República Dominicana se pierde el agua de lluvia por falta de reservorios y que sólo el 17 por ciento de la superficie del país es irrigada, por debajo del promedio mundial, que es de 20 por ciento.
Benítez indicó que ese porcentaje puede subirse a 40 por ciento con una adecuada política de inversiones en infraestructura hidráulica.
En ese sentido, abogó por una alianza política con el objetivo que todos los partidos políticos se comprometan con la sociedad dominicana hacer un programa inversión pública para los próximos 20 años para la construcción de todas las infraestructuras de riego y preservación de agua que requieren los sectores productivos y la población, de manera que haya un mejor aprovechamiento de ese recursos natural.
Agregó que eso significa que en los próximos cinco gobiernos, incluyendo el actual, se inicie un programa presupuestario de apropiación de recursos para la construcción de presas.
Entiende que ese pacto o alianza es de suma importancia, debido a que no se puede construir una presa grande con menos de US$400 millones, es decir, una inversión cuantiosa y que además no se construye en cuatro años, por lo tanto se requiere de una continuidad en la política pública con relación al agua.
Explicó que de las seis cuencas hidrográficas del país hay dos que no tienen ningún sistema de almacenamiento de agua.
Agregó que el 91 por ciento de las aguas que caen en República Dominicana se va al mar, es decir que solo un 9 por ciento se almacena.
Dijo que esa situación requiere de la construcción de presas en diferentes sitios del país, que ya han sido identificados.
Indicó que de acuerdo a un levantamiento se ha identificado 84 lugares en donde se necesitan esas infraestructuras de almacenamiento de agua, en los cuales 55 tienen que ser presas pequeñas o medianas, las que a su juicio pueden ser construidas en el presente período de gobierno y requerían una inversión entre los US$40 millones y US$100 millones.
El dirigente agroempresarial destacó la importancia de determinar por dónde empezar a levantar esas obras, tras considerar que desde el punto de vista del sector agropecuario hay dos zonas en las que es esencial hacerlo, porque garantizan el desarrollo de la producción y abastecimiento de alimentos para el pueblo dominicano.
En ese orden, destacó la necesidad de construir un contraembalse para la presa de Sabaneta, en Punta Caña de San Juan de la Maguana, en donde se podrían incorporar más de 200,000 tareas del Valle de San Juan a la producción agropecuaria.
Reveló que la JAD presentó la propuesta al presidente de la República, Danilo Medina, quien ordenó a la Empresa de Generación Hidroeléctrica Dominicana (Egehid) realizar el estudio correspondiente para ver la factibilidad de la construcción del contraembalse.
Sin embargo, sostuvo que el mandatario aseguró que esa obra será construida, lo que expresó es una “buena noticia para los sanjuaneros y para los agricultores”.
También se refirió a la construcción de un contaembase en la presa de Guayubín, al argumentar que los sistemas de riego que se abastecen del río Yaque del Norte no suministran agua suficiente a toda la línea Noroeste del país, además de que una parte llega con mucha contaminación.
Asimismo, dijo que en la región Este también se han identificado lugares para la construcción de una presa.
Puntualizó que aunque esa zona no tiene una alta producción agrícola es ganadera, además de un destino turístico.