Canoa.  Barahona. La economía de Barahona está estancada, mientras  siembra sus esperanza en un proyecto turístico que espera su aprobación en el Senado.

Este es el Complejo Turístico Termal en esta comunidad, cuya inversión total de la primera etapa asciende a 600 millones de dólares, y de realizarse  seria el complejo termal más grande del mundo, y el número 20 que realiza la empresa española Terma de La Salamandra, presidida  por Roberto Chetoni.

Según Chetoni, hace cinco años descubrió estas aguas azufradas y hace dos años firmó  la contratación del proyecto con el  secretario de Turismo de entonces, Félix Jiménez, y hasta ahora su  aprobación final ha sido imposible por diferentes vicisitudes, que Chetoni atribuye a  que “todavía la burocracia local esta prácticamente parando todo”, dijo.

El 28 de noviembre del 2007 el proyecto fue introducido a la Cámara el Senado pero hasta después de la Asamblea Revisora de la Constitución Nacional, el mismo no será  revisado.

Canoa tiene más de seis mil habitantes que viven de la agricultura y el motoconcho, las otras fuentes de recursos son empleos fortuitos y chiripeo. Otras fuentes adicionales pero de pueblos cercanos como Jaquimeyes y Tamayo son  una mina de sal, donde se les paga por carretilla, una camaronera donde trabajan pescando de noche, y una mina de yeso donde los hombres cobran por el yeso que obtienen.

Según  Alfredo Acosta, presidente de una junta de   vecinos del municipio, el proyecto  ayudaría al desarrollo de todos los pueblos del suroeste.

 “Hemos sido olvidados todos los años, si conseguimos eso es una bendición de Dios, muy importante y bueno y lo estamos esperando con los brazos abiertos”, dijo.

Acosta, al  participar en las reuniones con los impulsores del proyecto, dijo que  según lo hablado implicaría además la construcción de obras para la comunidad, como arreglo de calles, construcción de hospitales, escuelas, y acueductos. “Nos han dicho que todo eso es posible para mejorar la calidad de vida para la comunidad. Aquí no hay trabajo, es mejor contar quiénes trabajan, “porque desempleados somos muchos. En la región sur completa queremos ese proyecto”, expresó Marcos González, residente en Canoa.

Congreso 

El diputado oficialista  de Barahona, Víctor Terrero, explicó que la  principal razón porque el proyecto se ha estancado en el Congreso es porque le faltaban addéndum.

Dijo que se espera que en la próxima reunión del Senado este sea aprobado. “Lo que falta es que en una sección regular del Senado,  después de la revisión de la Reforma Constitucional, el proyecto sea aprobado”, expresó Terrero.

Aseguró que el turismo de salud es el más sostenible en estos momentos, sobre todo el de aguas termales, porque es un turismo seguro, pues no depende del aspecto climático.

 “Para nosotros este proyecto puede significar el antes y el después del desarrollo turístico de la zona, el despegue turístico de Barahona”, destacó.

Terrero dijo que la empresa Terma de La Salamandra  se ha reunido con los munícipes de Canoa y zonas aledañas, para que conozcan todos los detalles del proyecto  y tienen un apoyo “total”. Expresó que el Ayuntamiento de Vicente Noble, hasta el momento, no ha dado la carta de no objeción para su construcción porque exige obras comunitarias colacterales, pero ya se está llegando a un acuerdo con ellos.

Agregó que estas obras, como carreteras, escuelas y canchas podrían llegar “luego de terminado el proyecto”. 

La frase

Víctor Terrero

“La economía de Barahona esta estancada, nos estamos agarrando del turismo para poder desarrollarnos. Tenemos el Aeropuerto María Montes que es un elefante blanco donde no aterriza nada,  pero esta hecho con todos lo de la ley. Estamos en condiciones de tener un turismo sostenible en la región, no solo  de playa”

Proyecto termal

Chestoni resaltó que el proyecto en Canoa necesitaría de cinco a siete años para realizarlo completo. Destacó que  de construirse, éste seria la terma más completa del mundo con un territorio de  217 hectáreas, que tendría cuatro clínicas, spa y gimnasio, un hotel de cinco estrellas incluido de  300 habitaciones, campo de golf de 27 hoyos, villas y piscinas, cancha de tenis y centro de conveciones.

Seria todo una ciudad turística en Canoa, con tiendas, supermercados, restaurantes, dos helipuertos, teatros, además turismo rural para los huéspedes y hasta en un futuro  una marina.

La realización de este proyecto permitiría intercambio de profesores de Italia y Barahona para formar profesionales especializados en la materia.