Después de padecer durante diez años (2001-2011) una caída estrepitosa tras ser el principal polo turístico de la República Dominicana, Puerto Plata vuelve a levantarse con el rediseño de una oferta que incluye el turismo de cruceros, la revalorización de sus atractivos históricos y la ampliación de la disponibilidad de habitaciones.
Pero mantener ese florecimiento depende de la intervención gubernamental en obras cuya conclusión no pueden demorar: en primer lugar la eliminación del vertedero situado en la ruta de entrada a la ciudad, la terminación de la carretera Navarrete-Puerto Plata, de la denominada carretera turística que se conecta con Gurabo, en Santiago, y la reparación de un tramo de la carretera de Cabarete.
Sobre ese particular se expresaron, Mairení Bournigal, Sixto Peralta, Raúl Brugal, Andrés Pastoriza y José Natalio Redondo, representantes de varias entidades puertoplateñas que decidieron enmendar errores del pasado para desarrollar una estrategia que ya empieza a dar sus frutos con el aumento del flujo de visitantes en los últimos tres años.
Bournigal, miembro del Clúster Turístico de Puerto Plata, afirmó que la eliminación del referido vertedero y la apertura de otro está a expensas de las negociaciones entre los propietarios de esos terrenos y el Gobierno, ya que fueron declarados de utilidad pública.
En ese sentido admitió que ese depósito de basura genera un impacto negativo en el polo turístico, y que instalarlo en el lugar donde está fue uno de los errores cometidos en el pasado. Sin embargo confía en que esa situación se solucionará lo más rápido posible.
Al comparecer en el Almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio expresó, en otro orden, que aunque están conformes con las intervenciones que realiza el Gobierno en términos viales, los trabajos deberían avanzar un poco más.
Otra intervención esperada por los puertoplateños es la construcción de la autopista del Atlántico, dijo Bournigal, al destacar que el ministro de Obras Públicas anunció que se había retomado el estudio de la obra que, de ejecutarse, acortaría el trayecto hacia Santo Domingo a solo dos horas.
El empresario destacó además la importancia de la construcción de una planta de tratamiento de aguas re