La calificadora de riesgos Fitch Ratings resalta en su último informe sobre finanzas corporativas que la Central Termoeléctrica Punta Catalina contribuirá a la sostenibilidad financiera del sector energético del país, al introducir el carbón como elemento de peso en la matriz de generación.
Los analistas de Fitch Ratings afirman que, dado que el carbón ha mostrado precios más estables que los combustibles líquidos, el incremento de su participación en la matriz podría reducir la volatilidad de los costos en el Sistema Eléctrico Nacional Interconectado (Seni).
En este sentido, explican que el cambio a carbón podría contribuir al sostenimiento de un costo marginal de la energía relativamente bajo en medio plazo, “soportando costos de compra inferiores para las compañías distribuidoras, lo que resultaría en transferencias menores del sector público al de energía”.
La entrada en el mercado de Punta Catalina ayudará también, según Fitch Ratings, a mantener los costos marginales de la energía en el rango de US$6 centavos el kilovatio a US$8 centavos en 2018 y 2019. A esta estabilidad de precios moderados contribuirá también la continuidad de los precios moderados de los hidrocarburos.
Asimismo, Fitch Ratings opina que “es altamente probable” que la CDEEE tome ventaja del escenario actual de precios bajos de energía y de la expansión de la matriz de generación para liderar una nueva ronda de subastas para el otorgamiento de contratos de compra-venta de energía de largo plazo.
Cree que Punta Catalina aumentará la competencia en el Seni, inyectará entre el 35% y 40% del total de oferta de energía y permitirá que la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE “se convierta en un jugador muy relevante en el sector”.