El clima es parte de la geografía de un país, es un promedio del tiempo atmosférico. Los distintos tipos climáticos dependen de: 1. La latitud, 2. La altitud, 3. La distancia al mar, 4. La orientación del relieve terrestre con respecto a la insolación (vertientes de solana y umbría) y con respecto a la 5. Dirección de los vientos (vertientes Sotavento y Barlovento) y 6. Las corrientes marinas. Estos factores y sus variaciones en el tiempo producen cambios en los principales factores constituyentes del clima que son cinco: 1. Temperatura atmosférica, 2. presión atmosférica, 3. vientos, 4. humedad, y 5. precipitaciones.
Esos factores producen las condiciones naturales geográficas diferentes: biodiversidad, productividad, aguas y suelos. La Humanidad se adaptó de manera inteligente y sabia a esos factores del clima. Ahora bien, percibimos fluctuaciones o cambios en el clima y son fáciles de comprobar: lluvias, temperaturas, oleaje, algas, sequías, las dos estaciones del clima subtropical (humeda/seca) y las cuatro del clima templado, la intensidad de los ciclones, inundaciones… se modifican. Y es que el ser humano se ha convertido en el agente principal del cambio climático responsable. Su influencia comenzaría con la deforestación de los bosques en la Edad Media, para convertirlos en tierras de cultivo y pastoreo, después, con la Revolución Industrial y la incorporación masiva de materias primas a ese proceso, a base de combustibles fósiles. Ahora, se añaden las guerras, la urbanización especulativa de las inmobiliarias en zonas inundables.
Así se inicia el proceso de contaminación de la atmósfera, de las ciudades y del Planeta y la larga contabilidad de emisiones de gases que producen el cambio climático y el efecto invernadero en particular : el C02 de la industria y minería, el metano de las granjas ganaderas y los arrozales y la urbanización sin restricciones actual. Si no adoptamos nuevas reglas y limites, como lo que exige el Planeta y su supervivencia, seguiremos no solamente hablando de cambio climático por mucho tiempo… pero más grave aún, ya no podremos ni predecirlo, ni calcular los trayectos, la intensidad, la variabilidad de los eventos climáticos como ocurrió con Harvey, con Irma y con las sequías que afectan a Europa del Sur. Ese es el nuevo giro del cambio climático, adiós a los predicadores.