La Semana Santa activa en muchas personas el sentido de la sobriedad y la prudencia, del recogimiento y la reflexión, pero para otros es ocasión para dar rienda suelta a excesos y conductas que muchas veces terminan en trauma y dolor. Mientras unos respetan con sobriedad la esencia y origen de esta conmemoración, otros se desplazan a playas, balnearios, campos y centros de diversión para darse al gozo insano y desmedido, con alcohol, velocidad y pasiones de por medio.

Nuestra reflexión es que cuanto más desajustada es la conducta en el disfrute de su libre albedrío, mayor es su riesgo de sufrir las consecuencias que acechan cuando ocurren estos desplazamientos masivos y aglomeraciones en lugares de diversión. El despliegue de brigadas de socorro es simplemente una respuesta al peligro de accidentes, pérdidas de vida en playas y ríos, intoxicaciones por alcohol y alimentos, pleitos y otros percances.

Vayamos donde vayamos, la prudencia debe ser nuestro guía. Es la mejor forma de conservar la integridad sin renunciar a nuestro libre albedrío de hacer con este tiempo de asueto lo que más nos plazca. Año por año, la imprudencia aporta a la lista muertos y lesionados fruto de la temeridad y la imprudencia. El mejor disfrute es el que se puede referir y recordar con la satisfacción de haber actuado con prudencia.

Por una efectiva investigación

Proconsumidor había advertido hace aproximadamente un año sobre los riesgos de perjuicios que representaba para los ciudadanos la inversión de dinero en negocios que prometen un retorno de ganancias asombrosas en poco tiempo. Ninguna autoridad hizo caso a ese alerta y hoy son muchas las personas que temen perder sus ahorros como consecuencia de haberlos invertido de manera riesgosa.

Las autoridades del país están en el deber de desentrañar la situación y velar porque los ciudadanos que invirtieron en TelexFree tengan garantizado el retorno de su dinero. Hasta ahora lo que existe es la denuncia de que la compañía se habría declarado en quiebra y había cerrado sus puertas en el país. Hasta la hora de escribir este comentario nadie había presentado querella formal por esta causa. Las autoridades tienen que investigar el asunto hasta las últimas consecuencias.