Si usted cree que Donald Trump se encamina a la victoria, piense en apostar en acciones de defensa. ¿Predice una presidencia de Hillary Clinton? Pruebe con los servicios de atención médica.
Es lo que dice Highland Capital Management, un fondo de cobertura de US$17.000 millones que está planificando cómo manejarse con las polémicas elecciones de Estados Unidos.
Con un gobierno de Trump, algunos de los sectores económicos vistos como grandes ganadores serían el petróleo, el gas, el carbón, el gasto discrecional en consumo, la fabricación, la tecnología y las telecomunicaciones, según una presentación de la empresa.
De imponerse Clinton, los más beneficiados serían la energía eólica y solar, los materiales y los servicios y establecimientos de atención médica, dice la compañía. Sus ideas se basan en las políticas declaradas por los candidatos y sus antecedentes.
La perspectiva de Highland llega tras dos semanas de convenciones políticas en las cuales el republicano Trump advirtió acerca de inmigrantes peligrosos en el país y terrorismo en el exterior, y la demócrata Clinton prometió cerrar baches fiscales y volver más accesible la universidad.
Las encuestas los muestran muy cerca uno de otro. En el último promedio calculado por RealClearPolitics.com, Clinton llevaba una pequeña ventaja.
La empresa con sede en Dallas dice que no apoya a ningún candidato. Este es un análisis de cómo la administradora de dinero piensa que les irá a otros sectores:
Defensa, sector aeroespacial. El sector de defensa se beneficiará con los gastos de Trump, que prometió reforzar las fuerzas armadas, la inteligencia y la seguridad cibernética, dijo el gerente general de Highland, Michael Gregory.
“No necesariamente todos saldrán ganando”, dijo él, ya que Trump también es propenso a recortar lo que considera gastos innecesarios.
Energía. Las propuestas de Clinton podrían presentar un obstáculo para la energía con impuestos más elevados y más normas, dijo Gregory. Podrían cerrar más proyectos de infraestructura con carbón, podría haber más revisiones de oleoductos y las empresas de exploración y producción podrían verse perjudicadas por sus posturas contrarias al fracking.
Ella podría continuar la política del presidente Barack Obama de apoyo a la energía solar y eólica subsidiada, un buen presagio para las compañías de energía renovable.
Por su parte, su oponente “apoya la energía convencional, y la percepción de alivio ante la política de Clinton es un factor neutral o positivo para los fundamentos y la confianza”, dijo Gregory.
Trump “no aceptó los subsidios ni el apoyo federal completo para la energía eólica y solar, y comentó que las turbinas eólicas son un desastre ambiental y estético”.
Salud. Clinton trataría de expandir el acceso a la Ley de Atención Accesible, lo que impulsaría hospitales, establecimientos de atención médica, organizaciones de atención administrada por Medicaid y Medicare, administradores de consultorios médicos y los laboratorios de los medicamentos conocidos como biosimilares, dijo Michael Gregory.
Su “énfasis en la accesibilidad individual garantizará un acceso amplio y efectivo en términos de costos a la atención médica”, agregó señalando el apoyo de Clinton a los créditos fiscales para seguros y límites máximos para primas y desgravables. Ella también está a favor de expandir Medicaid.