República Dominicana es el tercer país de América Latina con la recaudación de ingresos tributarios más baja como proporción del Producto Interno Bruto (PIB), con un 13.9%, solo superior a Guatemala (12.4%) y Paraguay (13.8%).
Las cifras del país están muy lejos del promedio regional de 22.8% y aún más lejos del promedio de la OCDE de 34.2%, aunque a esta última cifra otros países de América Latina tampoco la alcanzan. Estos datos se encuentran en la publicación Estadísticas Tributarias en América Latina y el Caribe 2019. La edición de este año cubre 25 países.
El país con mayor recaudación de la región es Cuba, con 40.6% del PIB en 2017 y Brasil con 32.3%.
Según el estudio República Dominicana se encuentra dentro del grupo de 12 países que reportaron un aumento en sus tasas de recaudo tributario con respeto al PIB entre 2016 y 2017; mientras que 10 registraron una disminución y dos no vieron ningún cambio. En 2017, Guyana y Barbados registraron los mayores incrementos (de 2.6 y 2.2 puntos porcentuales respectivamente), mientras que Bolivia experimentó la mayor disminución (de 2.0 puntos porcentuales).
Indica que Colombia, República Dominicana, Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Panamá y Perú han implementado medidas para aumentar los ingresos y estos han tenido un efecto positivo en varios países gracias a la expansión del impuesto para que abarque todas las rentas del trabajo y del capital, incluyendo dividendos. Explica que algunos de los países de América Latina y el Caribe simplificaron su sistema tributario y ampliaron su base impositiva, lo que puede haber contribuido al aumento del recibo de impuestos. Similarmente, redujeron los números de las exenciones e incentivos tributarios otorgados a ciertas actividades y sectores, especialmente orientados hacia la atracción de inversión extranjera. Las reformas incluyeron la introducción o el desarrollo de regímenes simplificados para pequeños contribuyentes y la imposición sobre la propiedad basada en criterios de rentas presuntas.
Ingresos a la seguridad social bajos. En otro orden, en 2017, República Dominicana tuvo las contribuciones a la seguridad social más bajas de la región, con 0.5% de los ingresos tributarios totales, mientras en el otro extremo, con 39.2%, está Panamá. El nivel de estos ingresos en todos los países refleja las elecciones hechas por los gobiernos sobre cómo financiar los planes de seguridad social. En los países con esquemas de seguridad social públicos o mixtos, las contribuciones a la seguridad social alcanzan una participación más significativa (más del 20% de los ingresos tributarios totales).