El Gobierno del presidente Danilo Medina mantiene su postura de rechazo a la sentencia de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH) y se apresta a dar una respuesta de Estado al organismo, informó el titular del Ministerio de Relaciones Exteriores (MIREX), Andrés Navarro

Dijo que la administración de Medina no se ha negado a respetar los derechos humanos, sino que entiende que esa «inaceptable y prejuiciada» decisión de la CIDH pretende colocar al país ante la amenaza de una grave crisis de aspectos sociales y políticos, «al invitar al Gobierno a subvertir el orden constitucional y pisotear la autodeterminación y los principios soberanos de la nación a definir cómo se adquiere la nacionalidad dominicana».

Navarro refirió ante los diplomáticos extranjeros que frente a esa situación el Gobierno no pudo hacer otra cosa que negarse a aceptar ese fallo de la CIDH, porque llama a la desobediencia a la Constitución, las leyes adjetivas y a la realización de cambios en la estructura jurídica que vulnerarían los principios soberanos consignados en la Convención de La Haya para el concierto de países incorporados en la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

El canciller habló del tema en varios encuentros sostenidos por separado con algunos embajadores, donde detalló que la Cancillería se prepara para coordinar la formulación del Plan Nacional de Derechos Humanos, en el marco de su relanzamiento como ente facilitador de las políticas públicas relacionadas con el contexto internacional.

Navarro explicó ante los embajadores acreditados en el país que luego de haber creado en la Cancillería la Dirección General de Derechos Humanos, el siguiente paso será contar con un Plan Nacional de Derechos Humanos con la participación del resto de las instituciones del Estado y de las organizaciones de la sociedad civil que abordan el importante tema.

El canciller expuso que decidió reunirse personalmente con los diplomáticos extranjeros para que reciban la versión oficial directa sobre la incómoda e indeseada situación con la CIDH, y así evitar que sea a través de terceras personas, «siempre con el debido respeto a cualquier decisión que adopten los gobiernos que cada uno de ustedes representan con respecto al tema».

El primer encuentro en la sede la Cancillería se produjo con los embajadores de la Unión Europea, con Line Marie Bethe Leon-Pernet (Suiza), Victoria María Zimmermann Von Siefart (Alemania), Jaime Lacadena Higuera (España), Blandine Kreiss (Francia), Steven Fisher (Gran Bretaña), Marijke A. Van Drunen Littel (Países Bajos), y Olingo D’Agostino, encargado de Negocios de Italia.

Posteriormente hubo encuentros bilaterales con los embajadores Fritz Cineas (Haití), George Boissé (Canadá), Carlos Jesús de la Nuez López (Cuba), Ping Fi Hou (China-Taiwán), Oh Han-Gu (Corea) y Takashi Fuchigami (Japón).