El presidente de la Asociación de Fabricantes, Representantes e Importadores de Productos para la Protección de Cultivos (AFIPA), Ramón Castillo Lachapelle, sostuvo que en el país se invierte tan solo el 0.3% del Producto Interno Bruto (PIB) para la investigación en el sector agrícola, lo que es muy poco cuando se compara con otros países de la región América Latina, los cuales invierten el 1%.
Al participar como invitado en el Encuentro Económico de HOY, el presidente de AFIPA planteó la necesidad de que que los sectores público, privado y académico trabajen de la mano en el tema de la investigación agrícola.
Resaltó que el tema de la investigación es fundamental para la base de desarrollo de los pueblos, tras asegurar que sin ella “no hay nada”.
Dijo que el gran reto para aumentar la inversión en investigación es a partir del Estado, ya que el sector privado ha ido construyendo su estructura en ese sentido.
Abogó porque el nuevo ministro de Agricultura, Osmar Benítez, trabaje en una unificación de los sectores público, privado y académico para fortalece la capacitación e investigación en el sector agropecuario.
Asimismo, otros funcionarios en beneficio de todos los sectores productivos, de lo contrario el avance del país será limitado.
Destacó el esfuerzo del Instituto Dominicano de Investigaciones Agropecuarias y Forestales (Idiaf) y del Consejo Nacional de Investigaciones Agropecuarias y Forestales (Coniaf), pero entiende que hay que hacer más.
Castillo Lachapelle también ve como retos dentro del sector agropecuario la necesidad de preparar más profesionales especializados, tras recordar que varias universidades han cerrado sus escuelas de agronomía porque muy pocas personas están interesados en estudiar esa profesión por los bajos salarios que se pagan.
A esa situación se suma que también en República Dominicana hay un fuerte déficit de entomólogos, fitopatólogos que puedan trabajar temas relacionados a la producción agrícola.
Arroz-RD.Cafta. El presidente de AFIPA dijo que el arroz será el sector más impactado por el desmonte arancelario establacido por el DR-Cafta.
Dijo que una de las ventajas que tiene este cultivo es que al dominicano le gusta el arroz de producción nacional para asegurar “el concón”.
No obstante, entiende que el país se está moviendo a productores más competitivos que minimizarán el impacto negativo.