En el país  ha sido identificada una superficie de más de 400,000 tareas para la potencial producción de habichuelas negras para exportación  a Venezuela, a Haití,   y a otros países del Caribe.

Ya el país tiene experiencia en ese tipo de producción, debido a que se   ejecutó un programa con ese cultivo para consumo local y la exportación a Venezuela,  a la que se le vendieron 240,000 quintales. Además, se cuenta con  técnicos y productores con  experiencia en ese cultivo.

Ahora son mayores las posibilidades  para mantener una exportación sostenida de ese grano a Venezuela,  que se haría en intercambio por petróleo, en el acuerdo de Petrocaribe.

Con esos fines, ya  hay dos comisiones trabajando: una de la secretaría de Agricultura y otra de Hacienda. En la de Agricultura  participan técnicos del Consejo Nacional de Investigaciones Agropecuarias y Forestales (CONIAF) y del Instituto de Investigaciones Agropecuarias y Forestales (IDIAF) para identificar una política de seguimiento al cultivo de habichuela negra, según el titular de esa cartera, Salvador Jiménez.

La comisión de Agricultura prometió que rendirá un informe en el  menor  plazo posible, el cual  incluirá  “la parte tecnológica que debemos fortalecer   para discutirla con la comisión de la secretaría de Hacienda, para buscar el mecanismo idóneo para  cumplir con lo requerido por Venezuela para venderle habichuelas negras”.

La venta de ese producto a Venezuela brindaría al productor una alternativa sobre la  comercialización de la leguminosa, pero las autoridades tienen que reunirse con los integrantes de las diferentes asociaciones y federaciones de productores de San Juan de la Maguana y otras zonas para que conozcan en detalle  el proyecto de producción de habichuelas negras, afirma Jiménez. En el país  hay una mayor tradición en habichuelas  rojas y pintas, aunque siempre se ha sembrado algo de blanca y negra para consumo local y de los turistas. Recientemente, el país tuvo una producción de  40,000 quintales de habichuelas negras que vendió a Haití y a otras islas del Caribe que son nuevas  alternativas para el país. Además, el funcionario señala que las comisiones evaluarán las propuestas de algunos sectores de que se incluyan otros productos que podrían ser exportados  a Venezuela.

La zonificación agrícola es desde hace década un objetivo de  los sectores ligados a la agricultura, para hacer un uso más adecuado de la capacidad productiva. Agricultura preparó  una propuesta de zonificación para ordenar la producción agrícola nacional. Se hizo  de acuerdo a la capacidad productiva de los suelos por municipio, provincia y regional de esa cartera, y conforme a los requerimientos agroquímicos y ambientales de los cultivos. Es, además,  una normativa  que  permite al productor  cambiar de un sistema tradicional de producción a otro con mejor aprovechamiento de  recursos, posibilidades competitivas.

Producción de habichuelas negras

Un programa para la producción de habichuelas negras para exportación y consumo local fue propuesto por el ingeniero Juan Díaz Gómez, quien lo envió al secretario de Agricultura, Salvador Jiménez, en el 2006.

Gómez explica que si el programa cuenta con los recursos necesarios, podría exportar en un período no mayor de 18 meses unos 200,000 quintales y, al tercer  año,  puede llegar a los 400,000 quintales de las variedades Venezuela 44 y Constanza, sin incluir el consumo local, y se lograría un área bajo cultivo de más de un millón de tareas y una producción superior a los 2 millones de quintales.

Funcionaría con contratos similares a los del proyecto de producción y multiplicación de semillas, entre la Coordinación Nacional del Programa y los productores privados y/o el sector reformado, en los que el sector oficial se compromete a adquirir la producción total del producto, previa verificación de las normas y los controles de calidad contractuales. Además el productor se compromete a cumplir con los requisitos técnicos recomendados por el sector oficial, cubrir los costos de la producción y el transporte hasta los centros de acopio.

Los precios se fijarán conforme a los del mercado y podría haber un incentivo contractual. Agrega que el precio proyectado al 2008, sería de US$520 la tonelada métrica. Resalta que el incentivo a la producción de habichuelas negras tiene la peculiaridad de poder asociarla con la factura petrolera de Venezuela, lo que la convierte en un rubro de exportación soportado por el Estado con un mercado seguro. La Comisión Nacional de Leguminosas, la Coordinación del Programa y la subsecretaría de extensión capacitarán a los técnicos.     

LA CIFRA

40,000  quintales.  Fue la cantidad de  habichuelas negras que vendió el país a Haití y a otras islas del Caribe.