Los reclamos laborales por parte de distintos gremios adscritos al Estado continuaron ayer en Caracas y otras regiones de Venezuela en medio de la grave crisis económica que en los últimos meses también ha llevado a los ciudadanos a protestar por los fallos en los servicios públicos y la escasez.
Al conflicto laboral iniciado hace 25 días por el gremio de enfermería y docentes universitarios, solicitando mejores salarios, se han sumado el resto de los trabajadores sanitarios, de educación superior, eléctrico, telecomunicaciones, de ciencia y tecnología y productores caña de azúcar.
Todos estos sectores se quejan de que el salario que perciben no les alcanza para cubrir sus necesidades básicas en un país en el que la inflación diaria es de 2.8 %, según el Parlamento.
Las consignas “sueldos dignos ya” o “salarios justos ya” son constantes en estas protestas que ahora se suman a decenas de pequeñas manifestaciones que se registran por los fallos en el suministro de agua, de gas, los cortes de luz, la falta de unidades de transporte público y la escasez de medicinas y alimentos.
Los trabajadores públicos también se han quejado de las condiciones en las que se encuentran sus lugares de trabajo, como los del sector salud, que denuncian la falta de inversión en las infraestructuras y equipos de los hospitales.
Ayer los trabajadores de este gremio realizaron una asamblea entre representantes de varios hospitales y acordaron mantener el paro parcial de actividades y organizar nuevas protestas para seguir exigiendo el Ejecutivo reivindicaciones salariales. Maduro pidió a la Vicepresidencia y al Ministerio de Salud organizar una consulta nacional para transformarlo.