Riesgos potenciales fuera y dentro del vehículo

Riesgos potenciales fuera y dentro del vehículo

Los niños pueden sufrir accidentes en su condición de peatón, con responsabilidad directa de los adultos, y son más vulnerables a sufrir lesiones de mayor importancia por la relación de su superficie corporal versus la carrocería de los vehículos. Lesiones frecuentes son: lesiones del cuello, generalmente en los menores de 2 años por el tamaño de la cabeza en relación al resto del cuerpo y su columna vertebral frágil; lesiones de la cabeza, más vistas entre los 2 y 4 años ya que las vértebras no tienen la fortaleza suficiente para soportar desaceleraciones bruscas, y tienden a ser las lesiones más graves, y lesiones abdominales, generalmente en niños de 4 a 10 años y que pueden provocar lesiones y hemorragias internas.
Como pasajeros dentro de un vehículo también hay riesgos identificados pero potencialmente prevenibles. Un niño que viaja en el asiento delantero del carro tiene un alto riesgo de padecer lesiones graves al golpear contra el tablero en caso de una frenada brusca. Viajar con un bebé en brazos en el asiento delantero se convierte en un grave peligro ya que en caso de colisión, no podrá ser sostenido y puede golpearse contra las paredes del interior o salir disparado por el cristal delantero. Si la persona que lo carga además no está sujeta con el cinturón de seguridad, se agregan las lesiones producidas por el golpe de la persona contra el niño, agravando las consecuencias. Las bolsas de aire (airbag) instaladas son responsables de lesiones serias en niños que viajan en el asiento delantero.

Los niños que viajan sin estar sujetos, además de los riesgos ya mencionados, con mucha frecuencia condicionan la ocurrencia de accidentes por distraer con sus movimientos a la persona que conduce. Existe el riesgo de caer del vehículo en caso de abrirse una puerta o sufrir heridas al sacar los brazos por las ventanillas.

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