Ante la inacción, falta de apoyo económico y la desconfianza en los técnicos de la Dirección General de Ganadería (DIGEGA), el doctor Enriquillo Rivas renunció de la Comisión para Evaluación y Control de Influenza Aviar (IA), del Ministerio de Agricultura.
Rivas se quejó de la colocación tardía o ninguna de las estaciones móviles de control sanitario-militar en zonas específicas. Además, recordó que al país vendrían tres científicos especializados en Patología Aviar a evaluar los brotes y abundar sobre la política subsecuente sobre la Influenza Aviar.
Dijo además, que las reuniones de la Comisión se han ido extinguiendo y sus convocatorias mal coordinadas y escasos quórums. Hasta donde sepa, no hay actualización de reportes sobre el LAVACEN y las pruebas realizadas en los últimos meses.
Al señalar que en el mundo hay casi 80 países positivos con brotes de alta y baja patogenicidad de IA, de manera que, en cualquier momento la República dominicana volverá a agotar el problema en una intensidad que solo Dios sabrá.
Las declaraciones de Rivas están contenidas en una carta de renuncia que envió el primero de diciembre pasado al ministro de Agricultura, Osmar Benítez, que dice lo siguiente:
“Señor Ministro
Encarezco a usted acepte mi renuncia como miembro de una Comisión para Evaluación y Control de INFLUENZA AVIAR en la cual fui designado por el anterior titular de esa cartera, Ángel Estévez. Las razones de esta renuncia se deben entre otras:
1.-Desde su inicio los esfuerzos para enfrentar el morbo no contaron con el apoyo económico que supone este tipo de estrategia. Se gastó poco y con desgana.
2.-Ha sido notoria la desconfianza que existe entre los técnicos responsables de parte de la DIGEGA; asimismo con la certidumbre de la base de datos del LAVECEN (Laboratorio Veterinadio Central) respecto a los diagnósticos del material procesado en eventos iniciales.
3.-La implementación de medidas de control sanitario, tales como: a) el sacrificio de las aves positivas, b) deposición del material de cama (demasiado lento) y libre circulación de personal de granjas, c) colocación tardía (o ninguna) de las estaciones móviles de control sanitario-militar en zonas específicas.
4-Se recomendó, sin éxito, traer tres científicos especializados en Patología Aviar para evaluar los brotes dominicanos y abundar sobre la política subsecuente. Estos profesionales aceptaron de muy buen gusto venir al país y coadyuvar, como en otras ocasiones, en la ponderación y solución del problema. Ellos hoy se preguntan ¿Qué diablos han hecho los dominicanos? ¡El problema se auto extinguió!!!
5-Las reuniones de la Comisión también se han ido extinguiendo y sus convocatorias mal coordinadas y escasos quórums. Hasta donde sepa, no hay actualización de reportes sobre el Laboratorio Veterinario Central (LAVECEN) y las pruebas realizadas en los últimos meses.
Lo enigmático de todo esto es que en diez años hemos tenido dos episodios o brotes de IA comprobados. La serología rutinaria local no deja de señalar reactores positivos.

Hay casi 80 países del mundo también positivos con brotes de alta y baja patogenicidad, de manera que, en cualquier momento la República dominicana volverá a agotar el problema en una intensidad que solo Dios sabrá.

Con otro brote de Influenza Aviar no quiero estar dentro de los señalados por inacción o que alguien me enrostre un ¡te lo dije!

Agradezco su atención y deferencia al asunto. Aprovecho para saludarle, muy atentamente,
Dr. Enriquillo Rivas S.”
Brote IA en Cibao
La semana pasada hubo un brote de Influenza Aviar en granjas de pollos de Moca, en la provincia Espaillat, y las autoridades de Ganadería, Agricultura y el Ministerio de Salud aseguran que el problema está bajo su control, tras la aplicación del protocolo establecido para ese asunto. Rivas había renunciado antes del brote.