WASHINGTON
Agencias
El aspirante presidencial Bernie Sanders ganó este martes la primaria del Partido Demócrata en el estado de Oregón, superando a la exsecretaria de Estado Hillary Clinton por seis puntos porcentuales, de acuerdo con proyecciones de redes locales de TV.
En tanto, Sanders y Clinton estaban virtualmente empatados en el estado de Kentucky, con el 99% de los votos escrutados. Estos resultados mantienen a la exsecretaria de Estado al frente en la carrera por la nominación del partido, pero vuelve a mostrar la evidente división en el interior del electorado demócrata.
Al hablar ante una enorme multitud en Carson, California, Sanders agradeció este martes el apoyo de sus seguidores a pesar del favoritismo de Clinton.
Sanders recordó que en las primarias de 2008 Clinton había derrotado al entonces candidato Barack Obama por más de 200,000 votos «y sin embargo esta noche hemos obtenido la mitad de los delegados».
Por eso, Sanders descartó las presiones para que arroje la toalla y abandone la campaña: «Les quiero decir que estamos en esta pelea hasta la última urna», dijo. Para mantener viva sus esperanzas, Sanders precisa de victorias arrasadoras de forma de acaparar la mayoría de los delegados a la convención nacional, prevista para julio.
Donald Trump.- En tanto, el magnate inmobiliario Donald Trump, el único precandidato que queda en las primarias del Partido Republicano de EE.UU. y virtual nominado a las elecciones presidenciales, ganó ayer los comicios celebrados en Oregón, según las proyecciones de los principales medios. La de Oregón fue la tercera victoria de Trump en unas primarias después de la retirada de sus dos últimos rivales, Ted Cruz y John Kasich, tras ganar la semana pasada, también en solitario, las elecciones en Virginia Occidental y Nebraska. Ganar en Oregón supone para el multimillonario llevarse la mayoría de los 28 delegados en juego en el estado, lo que le acercará un poco más a los 1,237 que necesita para la nominación.