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El presidente Danilo Medina va a apoyar al Cibao para que se ocupe de nuevo del puerto de Manzanillo. Sin embargo, varias asociaciones de Santo Domingo auto-asumidas como expresión del empresariado, parece que no saben que varios de sus representantes corporativos suponen que los santiagueros y cibaeños pasan por alto sus inicuas gestiones contra el puerto del Manzanillo.
Desde las devastaciones sugeridas en 1605 por empresarios de la franja sur de la isla; ordenadas por el monarca español Felipe III y ejecutadas por el gobernador de Santo Domingo, Antonio de Osorio, hasta nuestros días (2018), el sistema portuario desarrolló 17 puertos. Estructuras que movilizan más de 40 millones de toneladas anuales de carga. Tonelaje que en más del 94% se mueve por el sur de la isla, vía los puertos de Haina y Caucedo.
Ratifiquemos entonces la prioridad de estructurar estratégicamente el puerto de Manzanillo y su área de Libre Comercio y Servicios. El proyecto es iniciativa de las agendas de desarrollo de varias provincias del Cibao y muy en especial del Plan Estratégico Santiago 2020. Implica la voluntad concertada del Gobierno, ayuntamientos, sociedad civil y cientos de empresas del Cibao.
La estructuración de este Puerto agilizará el comercio exterior y disminuirá costos de exportación. La mitad de la carga que sale por los puertos del Sur, cuando funcione Manzanillo, se entregará con tres días de anticipación, ahorrándose millones de galones de combustible y reduciéndose las excesivas 3.3 toneladas per cápita de gases efecto invernadero. Manzanillo también es contingencia para prevenir la pérdida de servicios energéticos asociada a catástrofes provocadas por huracanes y asegurar la ayuda humanitaria ante eventos. Es un factor decisivo para la atracción de inversión extranjera, que posicionará al país como el Hub Logístico del Caribe.
En su momento, con el apoyo de la Corporación Portuaria del Atlántico y hoy de la Autoridad Portuaria, el Puerto de Manzanillo pudo contar con estándares de seguridad, teniendo una mejor institucionalidad y nueva vía de acceso. La remodelación del puerto de Manzanillo y la operación del Muelle debe hacerse con altos niveles de eficacia. Debemos construir un puerto moderno, con tecnologías e infraestructuras; con políticas, normas y procedimientos de seguridad exigidos para transacciones en Estados Unidos, Unión Europea, Gran Bretaña y África mediterránea.
Este proyecto debe pensarse bien para lograr un Cibao más emprendedor, competitivo y de empleos formales. Se estima en casi 9, los nuevos empleos en los primeros 10 años. La Estructuración Estratégica del Puerto de Manzanillo debe dirigirse a estimular la renovación, fortalecimiento y reactivación de la estructura económica de la Región Norte.
Los resultados serían: i) incremento del comercio exterior de la región y el país; ii) armónica gestión de relaciones comerciales beneficiosas; iii) mayor visibilidad y accesibilidad de la isla en relación a otros países del Caribe y Centroamérica; iv) atracción de nuevas inversiones hacia el Cibao; v) operación como Centro Logístico entre Europa y el Caribe, tal como recomiendan más de 500 páginas de la Estrategia de Desarrollo 2030, Informe Attali, Plan Nacional de Logística de Carga. No hay intrigas que valgan, Santiago apostará mil veces más por el Puerto de Manzanillo.
