¿Se pasó Faride Raful de idealista?

¿Se pasó Faride Raful de idealista?

Millizen Uribe

Más que en las coincidencias, yo creo en las causalidades. Por eso no me extrañó que en una misma semana dos estudios, rigurosos y profundos, hayan sacado a la luz algo que muchos sospechábamos, pero que no podíamos cuantificar.
Me refiero a la publicación “Se buscan: recursos para garantizar derechos”, de la organización internacional OXFAM, y a una propuesta legislativa que presentó la diputada Faride Raful.
Ambas investigaciones siguieron caminos diferentes pero llegaron a una misma conclusión: El Estado dominicano está siendo administrado con mucho derroche y dispendio, por ende, los impuestos que pagamos se desperdician.
El informe de Oxfam revela que el Gobierno malgasta 90,000 millones del dinero público en sueldos “botellas”, corrupción, entidades que duplican funciones o no muestran actividad y en gasto desmedido de publicidad y propaganda.
De su lado, la propuesta de la legisladora identifica 57 instituciones que tienen asignaciones y/o transferencias de fondos por aproximadamente RD$15 mil 700 millones de pesos y que su impacto social es bajo, es decir que no hacen nada, o hacen muy poco, por lo que deberían ser eliminadas.
Algunos dirán que es obvio que esa propuesta no prosperará debido al costo político que supone despegar de la teta a los compañeritos que están chupando de ella, sin hacer nada.
Pero soy de las que pienso que como el Estado dominicano no es de un partido particular, ni de un grupo económico o social, a todos debería importarnos la denuncia de que el 2.5% del PIB se está desperdiciando de esta manera.
Esto porque vale la pena preguntarse: ¿Qué país tendríamos si agregamos este porcentaje, por ejemplo, al presupuesto de salud? (que no llega al 2%), a la lucha contra la inseguridad ciudadana y contra los feminicidios o al Ministerio Público y al Poder Judicial?
Definitivamente sería mejor.
Por eso, y porque no es que Faride se haya pasado de idealista, sino el Estado de clientelista, hay que cambiar la cultura política que se beneficia de esta mala gerencia y basa su “liderazgo” y “popularidad” en puestecitos.
Hay que reorganizar el Estado. Cuando a usted le falta dinero de su presupuesto, si usted es una persona responsable, no se endeuda ni gasta desmedidamente, sino que se reorganiza.
Ojalá que por el bien de todos, el gobierno acoja esta propuesta y deje de operar con la visión de “a lo que nada nos cuesta, hagámosle fiesta”, porque la verdad es que basta ver los niveles de déficit fiscal y endeudamiento público para ver que a nosotros sí nos cuesta, ¡Y mucho!

Millizen Uribe

Millizen Uribe

Periodista. Editora del Periódico HOY Digital

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