El Sistema Eléctrico Nacional Interconectado (SENI) cuenta actualmente con una disponibilidad real de apenas 2,575.07 megavatios, cantidad similar a la demanda máxima del país, lo que le impide mantener una reserva fría necesaria para garantizar la estabilidad y reducir la vulnerabilidad.
Las empresas distribuidoras suelen colocar un máximo de 2,300 megavatios, pero a esta cifra se suma la gestión de demanda, que se aplica en los sectores pendientes de rehabilitación de redes.
Si bien la capacidad instalada suma 3,246 megavatios, varias unidades generadoras están fuera de servicio por diversas causas, y un gran número de las plantas aporta por debajo de su capacidad nominal, lo que resta más de 700 megavatios al SENI.
Los requerimientos técnicos establecen que un sistema eléctrico estable debe mantener una reserva fría equivalente al 30% de la demanda real máxima.
Se llama reserva fría a la cantidad de megavatios que, si bien no está encendida en determinado momento, sí está lista para entrar al sistema si es necesario.
También es importante mantener una reserva caliente, equivalente al 3%. Reserva caliente es la cantidad de energía que estando encendida no se despacha, ya que es imprescindible para la regulación de frecuencia para mantener estable el sistema.
Actualmente están operando las unidades AES Andrés, de gas natural, con una capacidad instalada de 300 MW; Los Minas V, también de gas, perteneciente a la empresa DPP, con una capacidad instalada de 118 megavatios, pero solo está aportando al sistema 105. Asimismo, La Vega y Palamara, de la empresa GPLV se encuentran en operación aportando al sistema en conjunto 184 megavatios.
De igual forma, la Sultana del Este tiene una capacidad instalada de 102 megavatios, pero ofrece al sistema 62 MW. En tanto que Quisqueya II, también perteneciente a la empresa EGE-Haina está aportando al SENI 212 megavatios. Estrella del Mar 1 y 2, de la empresa Seabord ambas tienen una capacidad instalada de 183.3 megas y están aportando en estos momentos 110. De igual modo, CESPM 1, 2 y 3 se encuentran operando y poseen una capacidad en conjunto de 296 megas y aportando al sistema 288.
San Felipe opera a toda capacidad aportando al sistema 180 megavatio, así como Río San Juan, de la CDEEE, que ofrece al SENI sus 1.9 megas disponibles.