La activista feminista y ex candidata a diputada, Sergia Galván, hizo hoy un llamado al Senado de la República para que en la sesión de este lunes restablezca las tres causales que envió el Presidente de la República, Danilo Medina, de que el aborto pueda ser considerado cuando corre peligro la vida de la mujer, en caso de violación e incesto, y en cuando haya malformación incompatible con la vida.
En ese sentido, dijo que todas las encuestas han arrojado que la población, sobre un 80%, está totalmente de acuerdo a que en esas tres causales sea considerada la despenalización del aborto, e instó a que sean acogidas las mismas como claramente las fundamentó el mandatario.
“Estamos hablando que sobre esto se ha pronunciado el Colegio Médico Dominicano, la Sociedad Dominicana de Ginecología y Obstetricia, el viceministro de Servicio Nacional de Salud, la Ministra de Salud, la Ministra de la Mujer, o sea, sobre esta temática se han pronunciado las principales autoridades del país que enfrentan el dilema cotidiano de la salud. Esto es un asunto de Salud Pública y un asunto de derechos humanos, y punto”, expresó.
Entrevistada en el programa Toque Final con Julio Martínez Pozo, que se trasmite cada domingo por Antena Latina, canal 7, la activista feminista afirmó que penalizar de manera absoluta el aborto es convertir a las mujeres en unas simples incubadoras sin derechos, sin sentimiento y sin dignidad.
“Estamos obligadas a pagar con nuestra vida un embarazo que pone en riesgo nuestra salud. Yo no estoy a favor del aborto, nadie está a favor del aborto, es un último recurso que tiene una mujer para enfrentar un embarazo que amenaza su vida, que afecta su integridad y su dignidad humana”, expresó.
Dijo que es muy cruel e inhumano obligar a una mujer violada, víctima de un incesto de su abuelo, de su hermano, de su padre, a que cargue con el crimen de la violación, porque afirma, que ayudar a construir la obra de ese violador es una doble victimización de las mujeres.
Galván indicó además, que el asunto de la penalización absoluta es discriminatorio, porque solamente las mujeres se ven en la necesidad de enfrentar el dilema de interrumpir un embarazo, aunque este no lo conciben solas.
“Ninguna mujer se embaraza por el gusto de hacerse un aborto… yo no he oído nunca que una mujer diga: me voy a embarazar para hacerme un aborto, no, es una decisión que realmente cuesta, y nosotras las mujeres las que parimos, las que damos la vida, las que cuidamos la vida, nosotras sí sabemos de vida, porque no hay nadie en el mundo que cuide y que ame la vida más que nosotras. Las mujeres tienen capacidad ética para tomar decisiones sobre su vida reproductiva cuando se ven afectados sus derechos”, enfatizó.
Expresó además, que “una legislación como esta interviene en el ejercicio profesional. El médico tiene la formación y la capacidad para tomar una decisión. La función de los médicos es la de salvar vidas, y lo que hacen de manera permanente es intentar salvar siempre las vidas del feto y de la mujer, pero llega un momento en que tienen que tomar una decisión. Llevar a un profesional de la salud a 10 años de cárcel por haber salvado la vida de una mujer nos parece una injusticia social y una decisión poco sensata”.
Asimismo, entiende que llevar a la cárcel a una mujer que interrumpió un embarazo que sabía que era inviable es una sin razón y también una injusticia social.
Explicó que en caso de procesos espontáneos de aborto, los médicos van a tener miedo de intervenir y eso va a poner en riesgo la vida de la mujer, porque el médico tendrá miedo de correr el riesgo de ir a la cárcel.
Sostuvo que el médico primero va a querer investigar si es verdad que ese aborto es espontáneo mientras la mujer está desangrándose en una emergencia, y que con eso estarían poniendo en peligro la vida de la mujer.
En cuanto a lo que establece el artículo 42 de la Constitución, en su acápite tercero, sobre la autorización a recurrir a cualquier método quirúrgico cuando la vida de la persona está en peligro, dijo que el mismo es insuficiente para garantizar el acceso al aborto.
“Ese artículo es el soporte constitucional sobre el cual tendría que fundamentarse la despenalización del aborto por las tres causales. La Constitución marca la pauta a través de este articulo, pero necesitamos una legislación penal que establezca claramente cuáles son esas excepciones”.
Destacó que el legislador cuando traza una norma tiene un propósito, y ese propósito es dar solución a un problema, pero, entiende que ha quedado demostrado que la penalización absoluta del aborto no reduce la ocurrencia del mismo, al contrario, incentiva la práctica ilegal e insegura del aborto que pone en riesgo a las mujeres más pobres.
Citó las palabras del senador Julio Cesar Valentín en un programa de televisión: “Si a mi hija me la violan y queda embarazada no es verdad que yo la voy a obligar a tener ese muchacho, yo la llevo a Miami y le interrumpo el embarazo”, tras destacar, “eso lo puede hacer él, y lo felicitamos… pero no todas las mujeres tienen la posibilidad de tomar un avión e irse a los Estados Unidos, o aquí con su médico a interrumpir un embarazo”.
En tanto, explicó que ha quedado demostrado que el aborto solamente se previene con educación sexual en las escuelas, con un acceso amplio a métodos anticonceptivos, que según dijo, en el país están limitados, “en la red de farmacias del pueblo o Boticas Populares está prohibida la venta de métodos anticonceptivos, entonces realmente es con información que podemos prohibirlo. En los países desarrollados, en países que tienen acceso al aborto y que cuentan con información y métodos anticonceptivos ocurren menos abortos que en los países como República Dominicana donde está totalmente penalizado”.
Galván sostuvo que con la penalización absoluta no se previenen los abortos, ni la muerte del feto, lo que sí provoca es la muerte de miles de mujeres pobres cada año.
Informó que en el país 20 de cada 100 muertes maternas se deben al aborto en condiciones de riesgo, pero además, consideró que esa penalización absoluta violenta los derechos de las mujeres, y que ya el Presidente de la República, Danilo Medina, en la observación presidencial decía que esto es violatorio de derechos fundamentales a la salud y vida de las mujeres.
Señaló que hay una doble moral del Congreso porque en menos de tres años aprobó el aborto terapéutico, y luego lo desaprobó. “Aprueba el aborto por tres causales y luego lo desaprueba, o sea, donde está la responsabilidad de esos legisladores, en base a qué criterio, sencillamente porque esto forma parte de toda una manipulación política y de una falta de respeto a los derechos de las mujeres”.
La activista feminista afirmó que con el Código Penal los diputados(as) han traicionado a los dominicanos, y se han burlado de las mujeres pobres, a las que ellos les piden votos.
“Si a cada uno de esos diputados si se le presenta que su esposa, su hija, que su sobrina, que su nieta corra peligro frente a un embarazo ellos tienen las posibilidades de actuar… más las mujeres pobres no”, aseguró.