Síntomas que te delatan si eres obsesivo compulsivo

Síntomas que te delatan si eres obsesivo compulsivo

Hoy en día mucha gente, y cada vez más, sufre algún trastorno obsesivo-compulsivo (TOC). Los hay de muchos tipos, desde lavarse las manos demasiadas veces, hacer dieta constante o verificar siempre algo que has hecho para comprobar si de verdad lo has hecho.

Un trastorno obsesivo-compulsivo es un trastorno de ansiedad que se caracteriza por pensamientos intrusivos, recurrentes y persistentes que nos provocan inquietud, aprensión, temor o preocupación, además de conductas repetitivas que tienen el objetivo de reducir la ansiedad.

Recientemente los científicos han descubierto que algunos fármacos son eficaces para el tratamiento de estos trastornos, lo que ha cambiado el punto de vista que se tenía sobre este problema neurológico. Hoy no solo disponemos de terapias eficaces, sino que también se están investigando las cusas por las que se producen estos problemas para lograr nuevos tratamientos.

Uno de los trastornos más conocidos es el de lavarse las manos muchas veces al día. Una persona que sufre este tipo de TOC experimenta constantemente miedos y preocupaciones, y por ello ejercita esta acción. En concreto tiene un miedo abrumador a los gérmenes y a las bacterias, por lo que se lava las manos para librarse de ellas. Entre los efectos más negativos de este trastorno se encuentra la pérdida del pH de la piel.

Otro de los trastornos más comunes es el ligado a la alimentación. Hoy en día es tan común que en Estados Unidos 1 o 2 de cada 100 estudiantes lo padecen, ya que implica simplemente hacer dieta para perder peso o hacer ejercicio todos los días, pero con comportamientos extremos. Por ejemplo, hacer dietas que nunca terminan y que se vuelven gradualmente más estrictas o ir a correr para contrarrestar el dulce que se han comido en lugar de salir con los amigos.

Los trastornos más comunes en materia de alimentación son la anorexia nerviosa y la bulimia nerviosa, pero existen otros más nuevos como el denominado atracón o los relacionados con la imagen corporal o las fobias a determinados alimentos.

En esta ocasión, doblar la ropa se englobaría dentro de los rituales de repetición. Un pensamiento se introduce en la cabeza y es necesario repetir la acción siguiendo una secuencia determinada, o como en esta ocasión, repetir la acción un determinado número de veces.

La persona que dobla 20 veces una camiseta probablemente lo haga bien a la primera, pero su cabeza le manda repetir el ejercicio tantas veces como se lo había propuesto.

Otras veces el trastorno no se centra únicamente en repetir el ejercicio, sino en doblarlo a la perfección, sin tener en cuenta el número de veces que tenga que emplear para doblar una prenda.

En el número cuatro de nuestra lista se encuentra el trastorno obsesivo-compulsivo por la limpieza. Aunque generalmente está asociada a la prevención y desarrollo de enfermedades, puede ser contrario a la buena salud y el bienestar de las personas si nos situamos en un extremo.

Esta actividad cuenta con una serie de rituales para hacer las tareas diarias del hogar, que se repiten todos los días casi sin variantes y que, finalmente, se transforman en la razón de vivir. El pensamiento de las personas que sufren este TOC se repite, y su sentimiento es el de preocupación, inquietud y angustia.

El problema es que esta actividad obsesiva no le sirve para calmarse, sino que se produce un círculo vicioso y al poco tiempo vuelve a sentir la misma situación de malestar que antes, lo que les obliga a reiniciar los rituales de limpieza.

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