Shanghái, China. La multinacional tecnológica japonesa Sony ha formado una empresa mixta en la Zona Piloto de Libre Comercio de China (ZPLC), en Shanghái, junto a una empresa local, para poder producir allí e introducir en China su consola de videojuegos Play Station, donde competirá con la Xbox de Microsoft.
Después de que, con el nacimiento de la ZPLC, en septiembre pasado, acabase una prohibición de 14 años para producir y vender estos productos en el gigante asiático, y de que Microsoft hiciera lo mismo para empezar a vender la Xbox, según tiene previsto, en septiembre, Sony se ha asociado con el Grupo Perla de Oriente.
Se trata de una firma estatal de Shanghái de carácter cultural, con inversiones en instalaciones turísticas, como la emblemática torre de televisión Perla de Oriente, toda una seña de identidad de su ciudad, así como en operaciones inmobiliarias, publicitarias y mediáticas, y de servicios de emisión de radio y televisión.
Entre Microsoft y Sony se espera que resuciten muy pronto un enorme mercado para las consolas de videojuegos en el país oriental, y en esa competencia Sony planea en realidad abrir dos empresas mixtas diferentes con el gigante estatal shanghainés, revela hoy el diario Shanghai Daily, organismo de difusión del Gobierno local.
Aunque no se ha precisado la finalidad de cada una de estas firmas mixtas, entre las dos sumarán un capital registrado de 53,8 millones de yuanes (6,3 millones de euros; 8,6 millones de dólares), y Sony controlará el 70 por ciento de una y el 49 por ciento de la otra, según declaró el grupo chino ante la Bolsa de Shanghái.
“Entraremos en el mercado de los videojuegos en China e introduciremos títulos de videojuegos desarrollados en China para la Play Station”, explicó escuetamente en su comunicado bursátil el grupo estatal. De esta manera, Sony y Microsoft llevarán también al inmenso mercado chino su competencia mundial, en la que la Play Station 4 encabeza el mercado con más de siete millones de unidades vendidas en todo el planeta hasta la fecha, seguida por la Xbox One, la que se introducirá en China en septiembre, con cinco millones de ventas.
Por su parte, la firma japonesa Nintendo también tiene planes para entrar en China próximamente, dentro de una nueva etapa de expansión en Asia con nuevos productos desde el año próximo, aunque aún no ha anunciado nada concreto para el mercado chino.
De acuerdo con estimaciones de la consultora estadounidense PriceWaterhouseCoopers (PWC), el sector del videojuego producirá cerca de 10.000 millones de dólares en ventas ya en 2015 (7.320 millones de euros).
Entre los muchos cambios autorizados en la ZPLC de Shanghái de manera experimental, para atraer inversión extranjera y facilitar la internacionalización y la difusión del yuan como divisa mundial, en la nueva zona es posible fabricar consolas de videojuegos para su venta en China, lo que estaba prohibido desde hace 13 años.
En junio de 2000 siete ministerios chinos, encabezados por el de Cultura, prohibieron conjuntamente la fabricación y venta de consolas de videojuegos en el país, debido a su preocupación por la posible influencia que pudieran tener sobre los jóvenes chinos. Con todo, miles de aficionados chinos a estos productos los consiguen en el mercado negro de consolas y videojuegos piratas, extendido por todo el país.