El expelotero dominicano Sammy Sosa afirma que durante toda su carrera en las Grandes Ligas logró colocar verdaderos números que pertenecen al Salón de la Fama de Cooperstwon.
“La escogencia de llegar al Salón de la Fama no está en mis manos; ahora, los números están ahí”, comentó Sosa al responder una pregunta de este reportero ayer en el acto en el que ofreció un almuerzo a cientos de personas y entregó cajas navideñas en el Palacio de Voleibol en el Centro Olímpico Juan Pablo Duarte.
Sosa, hablando en un lenguaje claro y llano, expresó que todo tiene su tiempo y que no está desesperado.
“Yo espero vivir 120 años”, dijo en tono de broma.
Exclamó que tiene firme su esperanza de que en cualquier momento será escogido llegar al Salón de la Fama de los Estados Unidos.

El exjardinero de los Rancheros de Texas, último equipo que accionó en las Grandes Ligas en 2007, reafirmó que los números que logró durante su trayectoria en las Grandes Ligas son la mejor carta de presentación para estar en el Salón de la Fama.

“Yo soy un Salón de la Fama”, dijo Sosa durante la entrega de canastas navideñas a unas 750 personas este jueves en el Pabellón de Voleibol del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte y otras 700 en el polideportivo de la Universidad Central del Este en San Pedro de Macorís. “Entre ahora, mañana o a través del Comité de Veteranos, ahí voy a estar. Sea como sea yo voy a estar ahí, aunque se me involucre en cosas que todo el mundo sabe”, agregó.

El nativo de San Pedro de Macorís declaró que es de las personas que se mantiene tranquilo, a pesar del poco porcentaje que mantiene (8.6%) del 75% que se requiere para ser incluido en el Salón de la Fama de Cooperstown.

“Si por ahora no sucede, seguiré esperando, aunque sea por 120 años. Yo estoy tranquilo, repito, mis números están ahí y esos son los que hablan”, dijo Sammy Sosa, quien jugó en las Grandes Ligas por 18 temporadas con los Vigilantes de Texas, Medias Blancas de Chicago, Cachorros de Chicago y Orioles de Baltimore.
No tiene nada contra Chicago. El exjardinero derecho que militó con los Cachorros de Chicago subrayó que él respeta a los dirigentes y propietarios de los Cubs, pero no irá a tocar las puertas. “Ellos saben donde yo estoy, también”. Dijo que el tiempo lo cura todo y lo deja todo en manos de Dios.
Sobre Vladimir Guerrero. Sammy Sosa se mostró contento de que su amigo, Vladimir Guerrero pueda lograr llegar el año que viene al Salón de la Fama de Cooperstwon. “Eso da para todo”, comentó Sammy Sosa a la prensa deportiva.