Hace décadas, cuando los homosexuales enfrentaban el ostracismo y la amenaza de la acción penal en Reino Unido y otros países de Occidente, muchos optaron por casarse y ocultar su sexualidad. Pero incluso ahora que ha aumentado la tolerancia social hay quienes toman ese mismo camino.
Nick, que tiene unos 50 años, ha estado casado con su esposa durante 30 años. También es gay.
Cree que su esposa tuvo sospechas sobre su sexualidad durante años, pero las cosas llegaron a un punto crítico cuando él tuvo un romance con un hombre.
«Me preguntó si quería irme y no lo hice. Ella realmente es mi mejor amiga por encima de todo, así que decidimos que nos gustaba la idea de permanecer juntos como mejores amigos», dice.
Nick no es su verdadero nombre. Muchos de los amigos y familiares de la pareja no saben que él es gay y prefiere permanecer en el anonimato para proteger a su esposa.