Taiwán. Si algo hace que un lugar quede atrapado para siempre en nuestra memoria, aparte de su cultura, paisajes y la gente que lo habita es, sin lugar a dudas, su culinaria.

Los sabores de la comida de un país, y los condimentos con que esta se prepara, forman parte de su identidad. En Taiwán, también conocida como Isla Formosa, se disfruta de una cocina tan variada como nutritiva y tan deliciosa como saludable, resultado de su gran diversidad étnica.

Los vegetales, la carne de cerdo, pollo, pato, pescados y mariscos conforman los ingredientes básicos de platos exquisitos, aderezados la mayoría de las veces con salsas de soja, sésamo (ajonjolí), jengibre y ajíes picantes, siempre puestas como opción de uso en la mesa.

Las comunidades agrícolas incluyen la carne de cerdo como un alimento importante de su dieta, y generalmente la acompañan de arroz. En esta variante son muy apreciadas las albóndigas preparadas con la mezcla de brotes de bambú, setas y la carne de cerdo envuelta en una empanadilla elaborada con harina de batata (camote).

Las regiones costeras ofrecen los productos del mar preparados de forma muy simple, donde la frescura de su sabor y olor es lo mas importante. No es recomendable dejarse llevar por las apariencias. Es el caso de una sopa de almejas y pescado, cuyo caldo transparente distó mucho del exquisito sabor de sus ingredientes principales, y con un extra de sabor a mar, garantía indiscutible de su frescura.

Los xiao-chi. Disfrutar de la comida simple cotidiana también es un placer para los sentidos. Equilibrada y diversa, se pueden degustar hasta 10 y 11 variedades de queñas porciones, de nominadas xiao-chi pues es costumbre comer muchos platos diferentes en la mesa. Están divididos en ocho categorías principales de acuerdo con los ingredientes que los componen. De estos, mención aparte merecen las aves, especialmente el pato ahumadomarinado al estilo a-sium de Yilan y el pollo borracho, cocinado al vapor con licor, de sabor delicado y perfumado.

Los platillos de arroz y fideos también son muy demandados por los comensales de gustos más exigentes. Hay que probar los fideos delgados de arroz con almejas, un plato ligero y sabor extraordinario.

El tofu es un producto que está muy presente en la culinaria taiwanesa, este es preparado de muchas formas, incluso hay restaurantes especializados que lo sirven con sabores a carne, salmón y atún. Pero hay uno en partícular, el apestoso, que a los locales gusta mucho, pero cuyo olor puede impactar a foráneos.

Desde hace un tiempo, también se pueden encontrar restaurantes monetamáticos como es el caso de uno a base de la planta del loto.

Variada

En el distrito de Yilan

Hay un restauran donde la comida es a base de loto. Esta sopa es preparada con vegetales, donde destacan muchas variedades de hongos. Antes de servirla se coloca en su centro la flor de loto, una vez abierta se puede empezar comer

Dim sum

De estilo cantonés, son muy populares en todo Taiwán. Rellenos de carne y vegetales, también se pueden encontrar rellenos de chocolate amargo. Es un xiao-chi que hay que probar!

Tofu saborizado

Los platillos que aparecen en primer plano aparentan salmón y atún, mas es tofu con sabor a estos pescados. Cactus y ñame crudo rallado, con pulpa de chinola completan la imagen.

Arroz gratinado

El cuenquito de la derecha es arroz gratinado, la cucharilla contiene tofu, pepino amargo y rábano, mientras que el de atrás está elaborado con berenjena y pimientos y semillas de ajonjolí. Los taiwaneses acompañan la comida de té caliente y toman agua a temperatura ambiente. Dicen que el té caliente disuelve la grasa y que el agua fría la solidifica.