La Unión Europea (UE), al igual que ya lo hiciera China, ha acudido a la Organización Mundial del Comercio (OMC) por los aranceles impuestos por EEUU a las importaciones de productos de acero y aluminio, pese a que el bloque comunitario está eximido hasta al menos el 1 de mayo de esta medida.
En un documento remitido el lunes al Comité de Salvaguardias de la OMC, la delegación de la UE ante este organismo multilateral pide consultas con EEUU sobre los aranceles adicionales que Washington ha planteado y de los que ha eximido al bloque comunitario hasta el 1 de mayo, fecha en la que decidirá si prolonga la excepción temporal.
La UE entiende que, pese a que los aranceles del 10 % y 25 % a las importaciones de aluminio y acero, respectivamente, se basan en el argumento de la seguridad nacional, en realidad se trata de medidas de salvaguardia y que Washington no ha comunicado al Comité relevante de la OMC la decisión de adoptar este tipo de medidas.
Argumenta que la UE es un importante exportador de los productos afectados y que, por ende, tiene “un interés sustancial” en este caso. Por tanto “pide consultas con EEUU”, a fin de “intercambiar puntos de vista y buscar aclaraciones con respecto a las medidas propuestas, así como llegar a un entendimiento sobre las vías de alcanzar los objetivos fijados en el artículo 8.1 del Acuerdo de Salvaguardias de la OMC.
La UE añade que quiere celebrar las consultas “cuanto antes” con EEUU. Las consultas proporcionan a ambas partes la oportunidad de discutir durante 30 días el litigio y de hallar una solución mutuamente satisfactoria.