Desde hace varios años se ha estado hablando en el fútbol internacional de que el Mundial del 2030, cuando se cumplirían 100 de la primera Copa del Mundo, se celebre este certamen en Uruguay, sede de la primera edición.

Incluso se ha hablado de que sea una sede compartida. Primero, se rumoraba que serían Uruguay y Argentina las co sedes. Luego, se ha hablado de la posibilidad de que los uruguayos compartan el montaje con Chile.

Hasta el fallecimiento de Julio Grondona, quiera era el presidente de la Federación de Argentina, se daba por descontado que los guachos y los charrúas serian la sede del Mundial 2030. Pero tras el fallecimiento de Grondona, eso se ha esfumado y ha surgido la posibilidad chilena.

No hay dudas de que el planteamiento de que Uruguay sea nuevamente sede, cien años después, del Mundial de Futbol es más emotivo que futbolístico, aunque los uruguayos han tenido importantes participaciones a nivel internacional en los últimos eventos.

Pero no es la misma situación del futbol mundial de hace 30 años. Ahora son 32 países los participantes en el Mundial, y no los trece de 1930. Incluso la cifra de participantes podría aumentar para el del 2030.

Uruguay no cuenta con los estadios necesarios para montar una Copa del Mundo. Incluso, se ha hablado de que el famoso Estadio Centenario de Montevideo, construido para el Mundial de 1930, seria derribado y allí se edificaría un nuevo y moderno Centenario acordes a los nuevos tiempos.

Lo cierto es que el Mundial de 2030 será celebrado en América, o específicamente en América del Sur.