El Ministerio de Salud Pública informó ayer que tras el paso de la tormenta Emily, inició una jornada de búsqueda de casos febriles y diarreicos en refugios y otros lugares con alto riesgo de contaminación, ya que comúnmente las lluvias generan brotes de enfermedades.
El doctor Bautista Rojas Gómez, ministro de Salud, exhortó a la población a seguir las recomendaciones de las autoridades, absteniéndose de ingerir o hacer contacto con agua expuesta a contaminantes como orina de ratas o de otros animales; materia fecal, insecticidas, pesticidas y de otro tipo.
Afirmó que las acciones de prevención y control sanitario que se realizan incluyen, además, insistir en la orientación y educación a la población, descacharrización en los patios de los hogares y limpieza de los entornos familiares, en procura de poner un bloqueo a las enfermedades por la contaminación del agua y el medio ambiente.
Explicó que luego de agotar una etapa de prevención previo a la tormenta, corresponde ahora realizar labores de saneamiento ambiental y control vectorial.
Refirió que los períodos post lluvia están asociados a enfermedades hídricas y a otras, como: dengue, malaria, cólera y leptospirosis, razón por la que siempre es necesario intensificar las acciones epidemiológicas para evitar y controlar la propagación.
En ese sentido, informó que Salud Pública se dispone a reforzar la distribución y colocación de sanitarios móviles en puntos estratégicos, así como garantizar el suministro de cloro, bolsas de basura, entre otras medidas.
Indicó que un equipo de epidemiólogos y otros profesionales de las direcciones provinciales y de áreas se encuentran diseminados por toda la geografía nacional en las labores sanitarias de búsqueda y prevención.
De igual modo, la catera añadió, todos los centros sanitarios de la red pública de salud -muchos de los cuales habían sido previamente reforzados con suministro de medicamentos y otros insumos para la atención- están debidamente preparados para atender y dar seguimiento a posibles casos identificados.