Santiago, el Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo, son las tres zonas del país con mayor registro de sentencias por casos de violación, agresiones sexuales, y violencia intrafamiliar contra la mujer. De un total de 1,151 condenas emitidas en el 2014 por tribunales colegiados a nivel nacional, esos tres lugares acumulan en conjunto 597, según estadísticas judiciales.

De esas 1,151 condenas, 311 son por violación sexual; 179 por agresión sexuales, y 711 por violencia intrafamiliar contra la mujer. En Santiago se dictaron 301, en el Distrito Nacional, 193, y en la provincia Santo Domingo, 103.

En cantidad de personas condenadas por ese tipo de delitos le siguen Puerto Plata, con 87; San Juan, con 53; La Vega, con 45; Peravia con 38; Duarte con 25; La Altagracia, con 23; Monte Plata y San Cristóbal, con 20 cada una.
Denuncias no cesan. En el primer semestre de este año, las denuncias a nivel nacional por delitos sexuales totalizaron 2,653, siendo las más comunes la seducción de menores (853), seguidas de agresión sexual (790); violación sexual (617); incesto (200); acoso sexual (193), y por exhibicionismo (125), de acuerdo con estadísticas de la Procuraduría General de la República.

Las infracciones por violencia intrafamiliar se elevaron a 22,403 casos (8,764) física, 12,498 verbal y psicológica, y 1,141 patrimonial; mientras por violencia de género física sumaron 1,456, y la verbal y psicológica, 2,568.
Todas esas denuncias se reciben a través de 19 Unidades de Atención Integral a la Violencia de Género, Intrafamiliar y de Delito Sexual que operan en igual número de fiscalías de las 35 que hay en todo el país, dijo la procuradora adjunta para Asuntos de la Mujer, Roxanna Reyes.

Informó que de las 16 unidades de atención que faltan para cubrir todo el territorio nacional, el Ministerio Público trabaja para abrir este año las de Samaná, Sánchez Ramírez y Barahona, y mejorar la planta física de la provincia Santo Domingo, que es la más grande.

Agregó que para el primer semestre del 2018 está programada la apertura de dos nuevos centros de intervención conductual para hombres: uno regional en Santiago para la zona Norte, y otro en la provincia Santo Domingo que abarcará Boca Chica, Pantoja, Los Alcarrizos y Pedro Brand. En la actualidad hay en funcionamiento dos, uno en San Juan de la Maguana y otro en la provincia Santo Domingo.
Dos grandes proyectos. Para ampliar más las posibilidades de solución a la problemática de los feminicidios y la violencia de género en el país, Reyes dijo que se trabaja en otros dos grandes proyectos: un Servicio Nacional de Asistencia Remota a Víctimas; y la Ciudad Mujer.

El primero lo implementará la procuraduría General de la República con apoyo de la Junta de Andalucía, de España; y el segundo es coordinado por la vicepresidencia de la República, por instrucciones del presidente Danilo Medina,

Explicó que el “Contac-Center” como se denominará es un servicio interno de la PGR que funcionará con siete unidades entrelazadas y directamente conectadas a una central instalada en la Unidad de Atención a Víctimas ubicada en el Ensanche La Fe, en esta capital.

“Es un sistema que funcionará como un “call center” para ofrecer respuestas más rápidas y de manera eficaz a la víctima; es decir, las víctimas estarán siempre informadas de los niveles de avance de sus procesos; si su agresor fue liberado, para que no la sorprenda en las calles; las urgencias se le notificarán también a través de mensajes de texto, si tienen celulares inteligentes”, dijo Reyes.
En cuanto al proyecto Ciudad Mujer, informó que será construido en la provincia Santo Domingo, con módulos para Salud Pública, Policía, Ministerio Público, Gabinete Social y demás actores que trabajan el tema, “de manera que cuando una mujer llegue por ejemplo a la Unidad de Salud, y se determine que fue violentada, inmediatamente sea atendida allí, sea referida a la unidad que corresponda el caso que opera en el mismo lugar”.
La magistrada Reyes resaltó que esa es una experiencia exitosa en El Salvador y Honduras, y que así se hará como Piloto.