Un recorrido por la Séptima Maravilla del Mundo, La Muralla China

Un recorrido por la Séptima Maravilla del Mundo, La Muralla China

Especial para HOY/¡Vivir!. En los últimos años la República Popular China se ha convertido en el lugar más visitado por los interesados en hacer turismo, sobre todo porque combina el modernismo de la ciudad con su tradición y cultura.

Pero pese a su diversidad, en cuanto a atractivos turísticos, el lugar más visitado por el extranjero es su famosa Gran Muralla China, la cual está calificada como la Séptima Maravilla del Mundo.

Este lugar se extiende por territorio chino a lo largo de más de 7 mil kilómetros. Es considerada como la mayor construcción de defensa militar de la antigüedad y la que tardó más tiempo en construirse.

La muralla queda a unos 70 kilómetros de Pekín y va desde Shanhaiguan en el este hasta Jiayuguan en el oeste. Asimismo atraviesa seis provincias y regiones autónomas y un municipio del Norte de China: Hebei, Beijing, Shanxi, Mongolia Interior, Ningxia, Shaanxi y Gansu.

Historia. Esta muralla empezó a levantarse en el siglo IX. Los pobladores que dominaban las planicies centrales, es decir, las cuencas central e inferior del río Amarillo, decidieron defenderse de los ataques de los pueblos del norte con una muralla que uniera los muros, las almenaras y los castillos situados a lo largo de la frontera y desde la que pudieran vigilar los movimientos del enemigo.

En la construcción de esta muralla titánica, que desde lejos parece una larga serpiente que sube y baja, se aprovecharon las afiladas crestas de las montañas y los abruptos precipicios.

La muralla, levantada con ladrillos enormes tiene una altura de unos 10 metros. La anchura de su parte superior oscila entre los 4 y 5 metros, lo que permitía el paso simultáneo de 4 soldados a caballo y facilitaba tanto los movimientos de las unidades de combate como el transporte de cereales y armas.

Cuando llegas a uno de los puntos de la muralla se percibe el poderoso atractivo de su fabuloso bosquejo, formado por imponentes pasos, muros que parecen avanzar en zigzag y, plataformas altas y abruptas, atalayas en los rincones y torres almenaras.

Patrimonio de la Humanidad. La muralla fue nombrada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1987 y de acuerdo a informaciones ofrecidas por los guías, gran parte de la Gran Muralla tiene fama de ser el mayor cementerio del mundo.

Aproximadamente 10 millones de trabajadores murieron durante su construcción. Y no se les enterró en el muro en sí, sino en sus inmediaciones.

Un decir popular chino. Cuando los guías notan cierto cansancio en los turistas o en el público en general que visita este monumento, suelen expresar el dicho muy popular de que “el que no ha subido a la Gran Muralla no es una persona de verdad”.

La Gran Muralla representa, además la cristalización de la sabiduría, la laboriosidad, la sangre y el sudor de millones de trabajadores de la antigua China. Este lugar ha sobrevivido dignamente más de mil años de vicisitudes.

Tomar en cuenta. Precio de entrada a la muralla cuesta 45 yuanes (adultos), 25 yuanes (niños).

Si no deseas recorrer la muralla a pie, puedes hacer parte del recorrido en teleférico. Su precio oscila en los 60 yuanes ida u 80 yuanes ida y vuelta.

También cuenta con un pequeño tren donde su precio oscila en los 60 yuanes ida y vuelta. Debes visitarla en primavera, durante los meses de abril y mayo, y si quieres sentir un buen frío puedes conocerla en otoño, desde finales de septiembre hasta octubre.

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