La industria farmacéutica está recibiendo la colaboración de las autoridades para enfrentar la comercialización de medicamentos ilegales, actividad que definen como el principal problema del sector.
De acuerdo con los directivos de la Asociación de Representantes, Agentes y Productores Farmacéuticos (ARAPF) llevan más de 25 años luchando con la venta y producción de medicamentos falsificados y ahora están viendo una luz en el camino porque sienten el apoyo de las autoridades.
Al participar en el Encuentro Económico de HOY, Henry Suárez, presidente; Juan José Alorda, primer vicepresidente, y Fernando Ferreira Azcona, vicepresidente ejecutivo de ARAPF, destacaron que el año pasado junto a la autoridades participaron en 14 operativos de allanamiento en los cuales se incautaron de más de 70 millones de pesos en medicamentos ilícitos y fueron detenidas 14 personas que están siento sometidas a la acción de la justicia.
El presidente de la entidad dijo que en la medida que el tiempo avanza se van encontrando nuevas maneras de hacer las operaciones ilegales con los medicamentos, y ha pasado de contrabando de medicinas legales, a la falsificación de las mismas, lo cual ha tomado un auge importante en todo el mundo.
Suárez dijo que en el país se importan medicamentos falsificados y se fabrican para exportar.
Ferreira Azcona reveló que el año pasado ARAPF, junto a las autoridades, detectó tres laboratorios que tenían permiso legal del Ministerio de Salud Pública para fabricar medicamentos genéricos y se les ha dictado prisión preventiva.
“El respaldo que estamos teniendo del Ministerio de Salud Pública, de la Procuraduría General de la Salud, del Departamento de Inteligencia de la Policía Nacional, de la Dirección General de Aduanas y del Departamento de Falsificaciones de la Policía es importante y tenemos que valorar este esfuerzo”, declaró.
Expuso que ahora sí existe una política nacional definida contra los medicamentos ilícitos y el Ministerio de Salud Pública está apoyando esta lucha.
Suárez agregó que además hay una preocupación del sector privado y las farmacias se han acercado a ARAPF para recibir entrenamiento para reconocer los medicamentos ilegales y aquellos que no cumplen con los requisitos establecidos por Salud Pública.
Debilidades. Ferreira Azcona recordó se ha evidenciado debilidades en puertos y en los aeropuertos, según se reveló a principios de abril durante la celebración de un taller operacional sobre tráfico de medicamentos ilícitos auspiciado por el Instituto de Investigación de Lucha contra los Medicamentos Falsos (IRACM) y la Dirección General de Aduanas (DGA),
Para enfrentar esto, el Ministerio de Salud Pública nombrará 16 nuevos técnicos en los puertos, aeropuertos y pasos fronterizos para inspeccionar los medicamentos y alimentos que entran al país.
Además adquirió ocho vehículos para estos fines y a través del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) recibirá como donación ocho vehículos adicionales.
Indicó que para la primera semana de junio harán un foro internacional sobre medicamentos ilícitos, den el que participará un alto ejecutivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), un alto ejecutivo de la Organización Mundial de Aduanas (OMA), expertos de América Latina y dominicanos.
Agregó que otro de los temas que se detectaron en el taller fue que hay que crear conciencia en los jueces, que aún no entienden la magnitud del problema. Se trabajará junto al IRACM en una campaña de educación y sensibilización de los actores involucrados y los consumidores. “Estamos hablando de criminales que a sangre fría, con premeditación, ponen en el mercado productos que afectan la salud de los dominicanos”, dijo.
Educación de la sociedad. De su lado, Alorda indicó que se están observando los efectos de las medidas adoptadas por las autoridades pero aún queda mucho por hacer. En especial exhortó a que las farmacias, pacientes y la sociedad en su conjunto tomen conciencia de este problema, porque las consecuencias de consumir un medicamento adulterado, falsificado o contrabandeado puede ser tan fatal como la muerte de un ser querido o simplemente que una enfermedad no se cure en el plazo establecido y que se vuelva muy costosa para la familia recuperar la salud. “Todos debemos combatir este mal”, expresó.