El oriente venezolano vuelve a celebrar con la tercera corona del béisbol venezolano para Caribes de Anzoátegui, no solo en su historia, sino en las últimas siete temporadas.
De hecho, el palmarés del béisbol venezolano muestra un buen balance competitivo ubicando en el lugar de honor a cinco de sus ocho equipos en esta década, una cifra positiva que demuestra el hambre de la mayoría de las organizaciones de esta liga.
Esta ofensiva se hizo eléctrica y peligrosa con los exbigleaguers y veteranos bateadores Luis Jiménez, René Reyes y Niuman Romero.
El poder al bate se complementa con la velocidad y chispa alrededor de la segunda base con el torpedero de los Orioles de Baltimore Luis Sardinas, quien jugó en la final como refuerzo siendo ficha de los Tiburones de La Guaira, y el intermedia Alexi Amarista.