Verón-Punta Cana, La Altagracia
En ocasiones se habla de la gallina de los huevos de oro en Bávaro y Punta Cana pero solo se ve la parte bonita, el disfrute de las playas y los complejos hoteleros pero no lo que hay detrás: el distrito municipal de Verón-Punta Cana que no tiene una planta de tratamiento, ni acueducto ni ordenamiento territorial.
Así se expresó Ramón Antonio Ramírez, director del distrito municipal Verón-Punta Cana, en la provincia La Altagracia, zona que genera el 16% del Producto Interno Bruto (PIB) del país pero que apenas recibe un poco más de RD$3 millones al mes.
La asignación presupuestaria del distrito municipal es de RD$3 millones 243 mil al mes por asignación del Gobierno, el pago del 3% de la energía eléctrica y cuando se construyen hoteles.
Ramírez informó que, a pesar de los bajos ingresos, ha instalado casi tres mil luminarias y confía en que el Gobierno aporte recursos para poder cumplir con la demanda del territorio.
Deplora que el Gobierno otorgue los recursos en base al censo del 2010, cuando de manera incorrecta solo aparecieron 51 mil habitantes, cuando en realidad superan los 120 mil.
Sustenta esa cantidad de habitantes, 120 mil, a que tiene registrados 32 mil contadores o medidores eléctricos en igual cantidad de hogares. Establece que en cada vivienda se supone que habitan entre cuatro y cinco personas.
No cuenta en esa cifra los hogares de Punta Cana, Cap Cana, así como el sector La Ceiba, por lo que la cifra sería mucho mayor.
No cuentan turistas. Además, indica, el Ministerio de Hacienda no contabiliza la cantidad de turistas que llegan al lugar, alrededor de 500 mil al mes, lo que hay que tomar en cuenta ya que son ciudadanos que andan en las calles, utilizan los servicios municipales y producen residuos sólidos.
La ciudad. Define a Verón como una ciudad multicultural, ya que habitan personas de diferentes partes del mundo, no solamente haitianos, como se piensa.
Precisa que en la localidad habitan muchos españoles, venezolanos, así como una colonia donde residen más de tres mil rusos.
Ramírez explica que la demanda de servicios a través de la hotelería provoca que miles de dominicanos desde diferentes regiones se muden a Verón, por lo que hay personas de Barahona, Azua, San Juan y también de los pueblos del Este y del Norte.
Falta todo. Aspira a que con la Ley de Ordenamiento Territorial, Verón-Punta Cana pueda ser organizado y el desorden que existe actualmente sea corregido.
“Mientras tanto, necesitamos la colaboración de parte del Gobierno central, que se de a Verón lo que corresponde porque se llevan de aquí una cantidad enorme de dinero, sin embargo no se siente el retorno en comparación a lo que genera”, expresa.
Afirma que en la localidad hacen faltas cientos de obras y que muchos sectores y comunidades viven de espaldas al desarrollo, sin tener ni siquiera aceras y contenes, sin acueducto, sin planta de tratamiento y falta un gran hospital.
Por falta de un hospital, dijo, dos parturientas parieron dentro de un autobús, por la lejanía del centro asistencial, por lo que urge la construcción de un hospital y otras obras de infraestructura.
Ramírez siente vergüenza en torno a que Verón no cuente con una planta de tratamiento para las aguas residuales, por lo que cada complejo hotelero tiene su propia disposición, que no es lo correcto.