Con la prisa que llevamos cada día, nos resulta un poco difícil cuidar nuestra piel, y sobre todo, prestar atención a las áreas que requieren mayor cuidado y seguimiento, por esto es vital que una vez por semana nos dediquemos un “auto-mantenimiento preventivo corporal”. En un envase de cristal, mezcla una taza de azúcar morena, una taza de café y cuatro cucharas soperas de aceite de coco o de oliva, luego toma una ducha caliente para abrir los poros y en movimientos circulares, exfolia todo tu cuerpo con esta mezcla para una hidratación extrema que activa y mejora la firmeza de la piel, combate las celulitis y reduce significativamente las estrías. Puedes añadir a la exfoliación unas cuantas gotas de aceite esencial de tu preferencia, para dar un toque más intenso de aromaterapia.

Aceite de coco para el rostro
El aceite de coco es un poderoso hidratante natural, para todo tipo de piel. Puedes usarlo en los labios resecos, también puedes mezclar unas gotas de aceite puro a tu crema hidratante y al exfoliante; dos de sus mejores beneficios son prevenir la aparición de arrugas y restablecer el pH de la piel.

Mentas de sábila

Para cuidar tu piel desde dentro hacia afuera, algo que no debe faltar en tu nevera son las pastillas de sábila, estas pastillas se preparan cortando la sábila entera y luego de congelada, cortarlas al tamaño que prefieran y consumir diariamente y en ayunas.

¡Albahaca con los mosquitos!
Un repelente natural y efectivo contra los mosquitos es tener una plantita de albahaca; la puedes sembrar en una maceta y tenerla en la sala, comedor y hasta en la habitación.

Para los resfriados comunes

Una infusión que da resultados fielmente es la de cúrcuma, jengibre, limón y miel. Esta es ideal para combatir los síntomas de gripe, y si encuentras cúrcuma entera, mucho mejor, ya que es mejor rayada, al igual que ocurre con el jengibre.