NUEVA YORK, AP. Para los inversionistas, octubre tuvo su dosis de drama bursátil. Las acciones comenzaron el mes cerca de un máximo histórico, sólo para caer después a su peor bache en dos años.
Sin embargo, luego de flirtear con esta corrección —una caída de 10%—, el mercado accionario estadounidense repuntó y cerró con alzas sin precedentes en la última jornada de octubre.
Finalmente, las acciones estadounidenses terminaron el mes con un firme avance de 2,3%. El promedio industrial Dow Jones coronó su alza con una ganancia de 195,10 puntos, 1,1%, y se ubicó el viernes en 17.390,52 unidades.
El Standard & Poor’s de 500 acciones subió 23,4 puntos, 1,2%, y terminó en 2.018,05 enteros, en tanto que el índice compuesto Nasdaq ganó 64,60 unidades, 1,4%, y se ubicó en 4.630,74. Tanto el Dow como el S&P 500 cerraron con alzas históricas.
El resultado es sorprendente ante la volatilidad del mes, que a veces alcanzó niveles similares a los de la crisis financiera de 2008. Una vez más, octubre continúa con su historia desafortunada de movimientos inquietantes, como por ejemplo los derrumbes de Wall Street en 1929 y 1987.
En este octubre, el mercado dio tumbos ante los temores de que Europa estuviera cayendo de nuevo en recesión, preocupaciones por la caída de los precios del petróleo y la posible debilidad de la economía de Estados Unidos. Y no hay que olvidar el ébola. Debido a todas estas inquietudes, el mercado bursátil tuvo una tendencia predominantemente en baja durante dos semanas.
El punto más bajo tuvo lugar el 15 de octubre, cuando el S&P 500 estuvo a punto de entrar en una corrección. Los inversionistas habían previsto ese descenso. La última ocurrió a finales de 2011, e históricamente las correcciones en baja suceden cada 18 meses más o menos.
Pero justo antes de entrar en una corrección, el mercado repuntó. Las fuertes ganancias de empresas estadounidenses fueron el principal factor que propició la recuperación, así como indicios de que los bancos centrales de Japón y Europa están dispuestos a adoptar las medidas a su alcance para impedir que sus economías arrastren a todas las demás.
“No me parece una sorpresa que nos hubiéramos acercado a una corrección. Ya esperábamos una desde hace tiempo. Creo que la sorpresa mayor es cómo nos abrimos paso hacia el repunte”, dijo Bob Doll, director de estrategia de valores en la firma Nuveen Asset Management. “Cuando uno golpea a alguien en la frente con un martillo, no espera que se sobreponga de inmediato”.
En las últimas dos semanas, las compañías estadounidenses habían anunciado firmes resultados trimestrales en su mayor parte. Los beneficios corporativos aumentaron 7,3% en comparación con hace un año, según FactSet, a diferencia del 4,5% que habían augurado los inversionistas a principios de mes. Y las preocupaciones de principios de octubre sobre la economía estadounidense se evaporaron ante la difusión de información sobre ésta, la más reciente el jueves, la cual mostró un crecimiento de 3,5% en el último trimestre.