SAN FRANCISCO, California, EEUU. El cubano Yasiel Puig estaba emocionado por su primera apertura de la temporada en el jardín central, por le daba más espacio para correr y mostrar su increíble forma física. Pero en lugar de eso, su actuación del viernes por la noche será recordada por lo que hizo con el bate y en las bases.
Puig igualó el récord de la franquicia con tres triples y añadió un doble y dos remolcadas, en un juego en el que los Dodgers de Los Ángeles se ponían a medio partido de San Francisco, líder del oeste en la Liga Nacional, imponiéndose a los Gigantes por 8-1. “Estoy cansado”, dijo luego Puig, sacudiendo la cabeza tras sentarse más de media hora en la sala de entrenamientos envuelto en bolsas de huelo.
“Sólo intentaba pegar a la pelota donde no había nadie”. Los Dodgers empataron el récord del club con cinco triples, incluyendo tres durante una quinta entrada de cinco carreras con Tim Lincecum (9-7) como lanzador.
Es el mayor número de triples que registra la franquicia en un juego desde 1921, y la mayor cantidad lograda por un jugador de los Dodgers desde que Jimmy Sheckard conectara tres en 1901 para Brooklyn. “Eso es una locura, nunca he visto algo así”, comentó Matt Kemp, que tuvo tres sencillos —incluyendo un triple— tras cambiar del centro al jardín derecho.
Zack Greinke (12-6) lanzó siete innings de cuatro hits, ponchando a 10 y sin conceder ningún boleto. Tyler Colvin pegó una remolcada en la novena, en la única carrera de San Francisco. Por los Dodgers, el cubano Puig de 5-4, con dos remolcadas y dos anotadas.
También los dominicanos Hanley Ramírez de 5-2, con una impulsada y una carrera, y Juan Uribe de 5-0. En otro de los encuentros de la jornada, el técnico de los Medias Blancas de Chicago, Robin Ventura, no se sorprendió de ver a José Abreu haciendo algo espectacular.