La Cruz de Oficial de la Orden del Mérito de la República Federal de Alemania le fue otorgada al empresario de origen alemán Karsten Windeler, durante una recepción en el salón Bar Estar del Country Club, por el embajador de esa nación, Thomas Bruns.
En su discurso, el embajador destacó que esa Orden es la más alta distinción con la cual Alemania honra a hombres y mujeres destacados por méritos excepcionales. Para mi esposa María Fernanda y para mí, es un placer poder entregar esta distinción, dijo, y en nombre de Alemania agradeció los servicios al bien común por parte de Windeler.
Mientras de fondo se escuchaba la cancón My Way, popularizada por Frank Sinatra, el homenajeado Karsten Windeler expresaba, Si nuestra profesión y nuestro trabajo nos traslada a otros países, solamente una parte es de nuestra elección, lo demás es el cumplimiento de nuestro deber, pero si tienen la suerte de enamorase de una linda mujer, casarse y crear una familia, el mérito es también del país que los acoge.
Inspirado en esta famosa canción, originaria de un poema francés, el experto en transporte marítimo presentó un slideshow con fotografías desde los primeros años de su vida. Allí mostró imágenes de su primer día en el colegio, sus viajes de negocios, de su familia y de cómo fue creciendo con la llegada de sus hijos y sus nietos.
También se vio recortes de periódicos que rememorizaban la trayectoria de su trabajo a través de su naviera en este país, además de fotografía con distintas personalidades como el expresidente Leonel Fernández y el canciller Carlos Morales Troncoso. Asimismo imágenes practicando sus pasatiempos: pesca, golf y alpinismo.
Al final de la presentación, Windeler leyó las letras de My Way, que habla de un hombre de avanzada edad que mira satisfecho el acontecer de su vida mientras relata algunos de los aspectos más relevantes a un amigo.
Agradezco a toda mi familia, socios y clientes porque son los que han contribuido a mi éxito y por eso son parte integral de mi vida, concluyó. Luego los asistentes disfrutaron un brindis.
Reseña histórica
Karsten Windeler
Llegó al país en julio de 1966 como joven profesional y experto en transporte marítimo. Fundó un hogar con su esposa, con los años ha hecho de República Dominicana su segunda patria. Hoy además de ser un reconocido empresario, padre de familia, es también con toda la modestia que le caracteriza un humanista y visionario. Con su aporte decisivo se logró, hace casi 20 años, establecer la Cámara de Comercio, Industria y Turismo Dominico-Alemana, fue su presidente de 1996 al 1998; también fue determinante en la creación del Centro Cultural Dominico-Alemán. Por iniciativa suya se logró en 2011 un convenio de cooperación entre los jardines botánicos de Berlín y de Santo Domingo; valiosa la ayuda brindada por Windeler a la Embajada alemana y la Agencia Alemana de Cooperación al hacer llegar de manera urgente la ayuda humanitaria a las víctimas del terremoto en Haití en enero de 2010.