Las preocupaciones de las mujeres de la época actual que pasan de las tres décadas son planteadas con muchas gracia y humor en la pieza teatral Ahora o nunca.
Esta versión libre, de la obra Confesiones de mujeres, de Domingo de Oliveira, cuenta con las actuaciones de Edilí y Giamilka Román, dirigidas por Giovanny Cruz.
Las actrices dan vida a dos mujeres que pasan de los 30 años, quienes narran como les toca vivir la vida y cómo hacen para salir bien paradas de las situaciones que se les presenta.
En esta divertida pieza, que desde este viernes se está presentando en la Sala Ravelo del Teatro Nacional, ambas mujeres relatan desde la comodidad de sus apartamentos sus experiencias y ansiedades ante temas como la sexualidad, las arrugas, la celulitis, relaciones entre personas del mismo sexo, los romances con hombres jóvenes y la maternidad.
Aderezado con palabras típicas de los dominicanos, cada monólogo provoca la risa de la audiencia. Pero más allá de las situaciones jocosas que se presentan, la obra es una mirada hacia las mujeres, las inquietudes que trae consigo la vida moderna y cómo enfrentarse a esta realidad.
Ahora o nunca cuenta con una buena musicalización.
Cada canción seleccionada está en consonancia con el tema a tratar. Se pudo escuchar canciones de Edith Piaf, Shakira, Paulina Rubio, Rosana y Rita Indiana, entre otras.
Las actuaciones. Los papeles de mujer sexy y atrevida le correspondieron a Giamilka, quien logró hacer reír al público con su lograda actuación.
En tanto que Edilí asumió los de mujer madura y fuerte que no duda en asumir una relación con un hombre más joven.
Aunque las actuaciones se vieron más o menos equilibradas, Edilí se equivocó en diversas ocasiones. También hubo falta de coordinación cuando en una escena en debía entrar su voz no escuchó porque no habían bajado la música.
Ahora o nunca es una obra buena para dejar atrás el tedio.
Zoom
Cositas
Resulta molesto que la gente no respete los horarios y no llegue a la función a la hora indicada. Eso no es del agrado de los que llegan temprano.
Debe tomarse precauciones para evitar que la gente que va a salir o a entrar a la sala suene tanto la puerta.
Con tan solo una hora de duración Ahora o nunca no deja espacio para el aburrimiento. El público se ríe casi de principio a fin.
Las mujeres que ya rondan esa edad podrán sentirse identificadas con los personajes.